­Ya es oficial. Los datos confirman que la percepción de saturación turística de los residentes está más que fundada: nunca hubo tantos viajeros en la isla en temporada alta. El anterior máximo histórico queda triturado por el nuevo techo oficial: en el mes de julio llegaron a Mallorca 1.837.125 viajeros, tras un incremento del 9,5% sobre el anterior récord. Es decir, hubo en la isla 151.000 turistas más que en 2015. En un solo mes. Y si se abre el foco las cifras del abarrote se repiten, tanto cuando se mira al resto de Balears, como cuando se observa el resto del año 2016.

Pero por partes. Otras islas: la subida de la presión turística en Mallorca fue fuerte (9,5%), similar a la de Eivissa y Formentera (8,6% de crecimiento y nuevo récord de viajeros en julio, 582.181), pero nada comparado con la eclosión viajera de la isla hasta ahora más tranquila, Menorca, donde la cifra de visitantes se disparó un 23,5% en julio. En total, el archipiélago tiene ya un nuevo máximo de turistas en un mes: 2.755.321, de los que 2.359.277 fueron extranjeros y un 396.043, españoles.

Que ese es otro de los rasgos más relevantes de los datos difundido ayer por el Institut d´Estadística de les Illes Balears: el turismo nacional coge velocidad de crucero durante esta temporada alta, en la que avanza un 6,6% en Mallorca y un 8,6% en el conjunto de Balears. El aumento es inferior a la media, pero superior por ejemplo al registrado en julio en los dos principales clientes de Mallorca: tanto los viajeros de Alemania como los del Reino Unido incrementaron su presencia en la isla menos de un 5%.

Claro que un 5% de Alemania es mucho más de lo que aportan en total otros países. El resultado es que desde tierras germanas llegaron 608.866 viajeros en julio (72.000 más), por los 411.781 del Reino Unido y los 169.949 de España, que ha dejado de ser el tercer mercado más importante. Desde este verano ese peso recae en los países nórdicos, que crecen con un vigor inusitado: aterrizaron en Mallorca 171.831 nórdicos, un 33% más que en julio de 2015. Solo Francia, país dado a veranear en países hoy cerrados por terrorismo, como Túnez, desvía más rápido su turismo hacia Mallorca: este julio la isla habló francés como nunca, con un 55% de incremento de la cifra de viajeros galos, que alcanzó los 90.000. Suizos, rusos, holandeses y belgas completaron el mix viajero del mes del récord, en el que solo falló un mercado: los italianos se decantaron un 20% menos por Mallorca. La isla puede presumir de ser un destino más cosmopolita y menos dependiente de Alemania y Reino Unido.

No es la única noticia feliz pare el sector. Abriendo otra vez el foco, pero esta vez para analizar la campaña más allá del abarrote de la temporada alta, los datos constatan que Mallorca está logrando desestacionalizar. Fuera de la saturación de julio, las islas también crecen. Y mucho. De hecho, nunca Mallorca y Balears habían recibido tantos turistas entre los meses de enero y julio: fueron 8,73 millones de viajeros, un 11% más que en 2015, cuando la cifra alcanzó su anterior máximo. Es decir, hasta julio las islas han sumado la friolera de 811.761 turistas. Y faltan tres meses de peso por computar, los de agosto, septiembre y octubre, que serán fuertes, confirman en el sector hotelero.

Turismo desbocado desde 2011

Si se echa la vista aún más atrás, el boom turístico que desencadena esa sensación de saturación tan extendida este verano encuentra más razones objetivas. Concretamente, 1.667.447 razones, correspondientes al incremento de turistas registrado en los últimos cinco años: en 2011, de enero a julio visitaron Balears 7.068.365 viajeros, que hoy son 8.735.812, un 24% más en cinco años de lleno turístico y avance de las hacia su nivel de saturación.

Los datos arrojan luz también sobre una cuestión clave en este verano de debate sobre los excesos en el mercado del alquiler ilegal de apartamentos en edificios plurifamiliares a través de webs como AirBNB. La información deja dos lecturas complementarias. Primera: de los 1,68 millones de turistas recibidos por Mallorca en julio de 2015 (este año son más, pero no se desglosan por tipo de alojamiento), 1,19 millones se alojaron en hoteles. Es decir, el 70% siguen recurriendo a los establecimientos hoteleros en sus vacaciones en Mallorca. Pero ojo, segunda lectura: es fuera de los hoteles donde crece el turismo. Entre 2011 y 2015 el alojamiento hotelero en julio se redujo ligeramente (pasó de 1,21 millones a 1,19), mientras los huéspedes de apartamentos y alquileres se disparaban desde los 346.000 turistas de 2011 a los 498.000 de julio de 2015, un incremento del 44% que mete presión a la Conselleria de Turismo para que regule ya ese alquiler turístico que hoy se hace en muchos casos de forma ilegal y en negro.