La conselleria de Medio Ambiente anunció ayer que pedirá al Gobierno central que apruebe una moratoria de los proyectos de prospecciones mientras se tramita la declaración de Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo (ZEPIM) para el corredor de cetáceos que transcurre entre las costas de Balears, Cataluña y Valencia.
La Conselleria explicó que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha respondido las alegaciones que la dirección general de Pesca y Medio Marino presentó en la Consulta Pública de la Propuesta de Programas de Medidas Estratégicas Marinas , entre las que se solicitaba que el ZEPIM "fuera un compromiso firme y no sólo una posibilidad, como se especificaba en el documento". Añadió que el ministerio admite que ya se ha iniciado "de manera efectiva los trámites para la declaración de dicho corredor" y que la propuesta se incluirá en los documentos definitivos como uno de los "nuevos espacios en los que ya se trabaja".
El Govern "celebra" esta respuesta, pero considera que debe ir acompañada de una "moratoria preventiva de todos los proyectos que puedan suponer una amenaza para las poblaciones de cetáceos, en especial de las prospecciones en busca de hidrocarburos", por lo que pide al Ministerio que adopte cuanto antes estas medidas cautelares.
La Conselleria resalta que "el Ministerio continúa manteniendo los estudios sísmicos que quiere llevar a cabo en el programa de prospección y procesamiento de datos de los fondos marinos, en el que propone el levantamiento cartográfico y la caracterización del lecho marino", a pesar de la alegación presentada por el Govern en la que "le recordaba que este sistema es potencialmente dañino para los recursos marinos y claramente nocivo para los cetáceos".
En este sentido, precisa que "aunque el Estado argumenta que esta iniciativa se llevará a cabo con la técnica TOPAS (Topographic Parametric Seismic System) se siguen utilizando señales acústicas de baja frecuencia que contribuyen a incrementar el ruido antropogénico", según la carta que enviará la dirección general de pesca y Medio Marino. Por este motivo, pide que "se estudie su impacto ambiental y los potenciales efectos sobre los mamíferos marinos y los peces, a la vez que se niega que los datos del subsuelo marino sean prioritarios para el desarrollo del sector pesquero, del marisqueo o del acuicultura tal y como mantiene el Ministerio".
Además, la Conselleria insiste en que el Estado firme el Protocolo de alta mar del Convenio de Barcelona contra la contaminación que proviene de las actividades de exploración y explotación de la plataforma continental y el fondo y el subsuelo del mar. "La Unión Europea ha ratificado la medida mientras el Ministerio pide esperar a la transposición de una nueva directiva para poder evaluar con precisión los efectos del Protocolo", precisa el Govern.
Alianza Mar Blava
Por otro lado, los ayuntamientos de Inca, Sant Llorenç des Cardassar, Son Servera, Santa Eugènia, Valldemossa y Es Migjorn Gran, se han adherido a la Alianza Mar Blava, tras una decisión aprobada por unanimidad en sus respectivos plenos, con el fin de incorporarse a la lucha por un Mediterráneo libre de prospecciones petrolíferas, según informó la organización.
Con la incorporación de estos ayuntamientos y otras entidades de la sociedad civil, del sector privado y de la administración balear, son ya 107 los miembros que integran la Alianza. "Gracias a ello se refuerza la representatividad social de la Alianza, lo cual resulta de gran importancia de cara a la necesaria interlocución ante el Gobierno central y en diversos foros de ámbito estatal o internacional", destacó la organización.
