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Trabajo

La recuperación económica deja de lado a los mayores de 45 años

Las asociaciones de parados de más edad acusan a las empresas de "discriminación" y califican de "misión imposible" encontrar empleo

Casi la mitad de los parados registrados en el Soib son mayores de 45 años.

"Aunque no se reconozca, las empresas nos discriminan", aseguran los presidentes de las dos asociaciones isleñas que en la actualidad representan a los parados mayores de 45 años, desde las que se afirma que para el citado colectivo la reincorporación al mercado laboral resulta prácticamente una "misión imposible". Tanto, que una de estas organizaciones ha optado por un nuevo enfoque en su labor, como es la creación de su propia empresa para el desarrollo de proyectos, como el reciclado de los colchones viejos de los hoteles.

Pedro Delgado, presidente de la Asociación de Mayores Parados por el Empleo de Balears (Ampeb), y Fausto Villanueva, máximo responsable de la nueva Asociación de Parados Emprendedores de Balears (Apeb), coinciden en el diagnóstico: la recuperación económica no está llegando a los mayores de 45 que han perdido su puesto de trabajo. Al respecto, Delgado recuerda que en las ofertas de empleo está prohibido exigir tramos de edades determinados, pero "cuando se envía el currículum y pones tu fecha de nacimiento, ni siquiera te llaman a las entrevistas". Esta afirmación es respaldada también por la secretaria de Empleo de CC OO, Silvia Montejano, que lamenta la expulsión del mercado laboral a partir de la citada edad.

Todos ellos coinciden en otro punto: la reforma laboral que el Gobierno del PP impulsó en 2012 provocó una salida masiva de las empresas de los trabajadores de más edad al abaratar de forma sustancial el coste de su despido. Eso hizo que se vieran excluidos de las plantillas muchos de los trabajadores que gozaban de una mayor estabilidad, según recuerda Montejano, y también con los salarios más altos por su antigüedad, para ser sustituidos por jóvenes con contratos precarios y sueldos bajos.

La Encuesta de Población Activa señalaba en el segundo trimestre de 2007, antes de que se iniciara la crisis, los mayores de 45 años suponían el 18,7% de los desempleados de las islas, tasa que se fue elevando hasta alcanzar el 25,3% en esas mismas fechas de 2011 . Pero fue en 2012, con la reforma laboral, cuando en Balears este colectivo pasó a representar el 30,5% de los desocupados isleños. Durante el segundo trimestre de este año, este porcentaje se situaba en el 29%, lo que refleja el elevado coste que los mayores de 45 años han pagado durante la crisis en materia de pérdida de empleo. Si miramos los datos del paro registrado durante el pasado mes de julio (es decir, los inscritos en el Soib), este colectivo supone por si solo casi la mitad del desempleo balear (un 48,4%).

Villanueva, Delgado y Montejano lamentan la escasísima sensibilidad de los empresarios hacia estas personas, pese a disponer de una notable experiencia en su campo laboral. Ciertamente, no se oculta que se trata también de un grupo con una menor adaptación a las nuevas tecnologías o con problemas para cambiar de sector económico por falta de formación, como puede ser el caso de asalariados que históricamente desarrollaron su carrera profesional en la construcción y que ahora no encuentras la forma de reincorporarse por falta de actividad en estas empresas, al tiempo que no tienen preparación para entrar, por ejemplo, en la hostelería.

El resultado es que aunque hay mayores de 45 años que encuentran un trabajo, éste suele ser de carácter temporal por un máximo de tres o cuatro meses al año y escasamente retribuido, mientras que los que no consiguen esta reincorporación se ven condenados al desempleo de larga duración.

Si el diagnóstico es similar, las diferencias aparecen a la hora de afrontar este problema. La Ampeb dirige sus reivindicaciones hacia la Administración y más concretamente al Gobierno central, del que reclaman medidas que potencien la recuperación laboral de estas personas. "El problema está en las empresas, y si éstas no tienen incentivos para contratar a los mayores de 45 años, no hay nada que hacer", lamenta Delgado.

Por contra, la salida de Apeb es diferente. Esta nueva asociación ha optado por abrirse a parados más jóvenes, y en su acaso ha hecho una apuesta por crear su propia empresa (Autoempleo Más 45), cuya constitución se está tramitando. Su objetivo es desarrollar proyectos como hacerse con los colchones viejos de los hoteles para darles una segunda vida, o reciclarlos y aprovechar sus componentes, como muelles o espuma. "Las empresas no nos van a dar trabajo, así que hemos de crearlo nosotros mismos", señala Villanueva.

Montejano reconoce que "no todos sirven para emprendedores", de ahí que se sume a las voces que reivindican un cambio de mentalidad empresarial para volver a contratar a este colectivo.

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