Balears cerró el mes pasado con 46.719 empresas de alta en la Seguridad Social, con un apreciable crecimiento respecto a las 45.418 contabilizadas en junio de 2015. Sin embargo, estos datos ponen también en evidencia que muchos municipios pequeños de Mallorca están teniendo problemas para encontrar la senda del crecimiento y recuperar su tejido económico. En concreto, 16 poblaciones de la isla presentan en junio de este año menos empresas en activo que doce meses atrás.

En las grandes núcleos, la mejoría resulta evidente. Palma ha pasado en el último año de contar con 15.624 empresas a alcanzar las 16.040. Calvià ha crecido desde las 2.702 hasta las 2.744, Manacor lo ha hecho desde las 1.469 hasta las 1.503, e Inca ha pasado de 926 a 956. En el caso de Llucmajor, su tejido empresarial se ha incrementado de 979 centros a 1.002, y el de Marratxí de 952 a 1.001

Más ejemplos de evoluciones positivas son los casos de Pollença, que sube desde las 811 a las 857 empresas; Alcúdia, de 908 a 928; y Santanyí, de 798 a 816.

Evolución negativa

Pero como se ha indicado, hay excepciones a esta evolución positiva, entre las que cabe destacar la situación de Capdepera, que desciende desde las 606 empresas de junio del pasado año hasta las 600 del mes pasado; la de Santa Margalida, que baja de 466 a 461; o Muro, de 319 a 307.

El listado de municipios con descensos se amplia con otros escasamente poblados, lo que refleja los problemas de los pequeños para atraer nuevos centros de trabajo. La lista de poblaciones con un tejido empresarial más debilitado actualmente que en 2015 incluye a Algaida, Búger, Deià, Estellencs, Fornalutx, Llubí, Maria de la Salut, Montuïri, Porreres, Santa Eugènia, Santa Maria del Camí, Sineu y Vilafranca.

Un caso excepcional: Campanet ni sube ni baja, con sus 72 empresas.