­El Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (Imas) ha puesto en marcha el Reglamento de Servicios Sociales para Personas con Discapacidad de la isla, una iniciativa que aseguran que es pionera en España. Sus principales objetivos son simplificar y unificar el modelo de prestaciones y procurar un alto nivel de exigencia en calidad para las entidades que formen parte de la red pública de este tipo de servicios.

La consellera de Bienestar y Derechos Sociales y presidenta del Imas, Margarita Puigserver, destacó que el reglamento prevé desarrollar los nuevos modelos de servicio basados en soportes personales y fijar los requisitos de acreditación para que se puedan concertar los servicios de acuerdo con la Directiva Europea sobre concertación social.

Incorpora además los principios de la adaptación a la normativa en la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, la Ley General de Derechos de las Personas con Discapacidad y la de Servicios Sociales de Baleares.

En concreto, la normativa, que será aprobada durante la próxima sesión del plenario del Consell, prevista para mañana, se centrará principalmente en el desarrollo de posibilidades en la vida diaria, el aprendizaje para la adaptación al empleo; la salud, seguridad, protección y defensa de los derechos, y el impulso las relaciones personales en la comunidad.

Para formar parte de la Red de Servicios para Personas con Discapacidad de Mallorca mediante el concierto social con el Imas, se deberá acreditar un alto nivel de calidad en lo relativo a la atención (plan de atención personal, aseguramiento y mejora de la satisfacción). También se deben cumplir unas bases éticas y derechos, así como tener unas condiciones de gestión (certificación de calidad, protección de datos e indicadores de resultados) y de sostenibilidad. La normativa habla asimismo de calidad del empleo (más del 70 % de contratación indefinida y plan de formación).