Los hoteleros isleños van a volver a hacer el agosto durante el próximo año a la vista de los incrementos en los precios que están consiguiendo arrancar de los tour operadores. Según fuentes del sector, con las negociaciones con los alemanes ya cerradas y en plenos contactos con los británicos, cada cama de Mallorca se va a cotizar durante 2017 entre un 4% y un 9% por encima de este año, con un aspecto clave que hace que este punto obtenga una mayor relevancia: estas subidas se habían conseguido ya durante los tres años anteriores y además se aplican sobre revalorizaciones en los hoteles recien reformados que en algunos casos habían alcanzado el 20%.
El dato es compartido por representantes de diferentes zonas de las islas. Las subidas de precios para el próximo año vuelven a ser notables y se sitúan entre un 4% y un 9% de media, dependiendo del lugar y de la categoría de estas instalaciones. En el caso de que se trate de un establecimiento recien reformado, el aumento puede superar sin problemas el 10%, pero hay que tener en cuenta que cada vez quedan menos hoteles que no hayan afrontado ya esta modernización.
Las empresas de alojamiento no ocultan que tenían previsto obtener de nuevo unos más que apreciables aumentos en sus precios para la temporada del próximo año, pero la decisión británica de abandonar la Unión Europea y la devaluación de la libra que le ha seguido hacían temer que desde ese país se reivindicara una congelación de las tarifas hoteleras. Pero de momento, esa pretensión, o no se ha planteado, o se ha hecho con muy poca convicción y sin demasiada fuerza, según se felicitan los representantes del sector.
La explicación que desde las empresas hoteleras se da a la debilidad en la presión de los tour operadores británicos para que no se suban los precios es bien simple: las alternativas a traer a los turistas a Mallorca son muy escasas porque destinos como Turquía, Egipto o Túnez siguen fuera del tablero de juego a causa de la inestabilidad que padecen. Según comenta un hotelero isleño, los operadores "saben que han de pasar por la isla sí o sí", así que de poco sirve discutir por el precio de algo cuando son más los que lo quieren que los que lo ofrecen.
Como se ha indicado, el factor más relevante no es solo que los precios de la hotelería mallorquina obtengan semejantes repuntes, sino el que llevan ya tres años manteniendo ininterrumpidamente esa fuerte tendencia al alza, derivada de los problemas de la competencia.
En este sentido, se recuerda que los hoteles que se reformaron durante los últimos inviernos consiguieron, una vez concluidas las obras, elevar sus tarifas hasta un 15% e incluso en algunos casos se llegó al 20%, según se reconoce desde el sector, a lo que se están sumando las nuevas subidas antes señaladas para las siguientes temporadas.
Nadie oculta que Mallorca está consiguiendo un nivel de éxito tan elevado a causa de los problemas de otros y que una parte delo turismo que recibe es "prestado".
Fidelizar a los clientes
Pero se defiende que el sector del alojamiento está aprovechando esta coyuntura para fidelizar en lo posible a los nuevos visitantes , y se señala que el ejemplo más claro de ello son las obras que se han realizado en sus establecimientos para elevar su calidad y, en muchos casos, su categoría.
Si se pregunta la opinión de los hoteleros respecto a si la oferta complementaria está haciendo esa misma apuesta por la fidelización de la clientela, la respuesta pasa por el silencio o, en el mejor de los casos, por valorar algunas iniciativas puntuales, pero en general se pone en duda que el esfuerzo hecho por otros sectores turísticos esté a esa altura.
En cualquier caso, se reconoce por parte de algún representante del sector hotelero que esa fidelización es cada vez más complicada, porque "a los jovenes les gusta cambiar y buscan experiencias nuevas", a diferencia de lo que sucedía con muchos de los clientes de generaciones anteriores, que año tras año repetían destino e incluso establecimiento.
Pero precisamente este éxito es lo que hace que desde las organizaciones sindicales, conscientes de lo bien que han funcionado las últimas temporadas, se critique con dureza que las contrataciones que las empresas hoteleras han realizado para hacer frente a ese volumen de visitantes queden por debajo de lo que sería adecuado, con constantes denuncias relacionadas con las sobrecargas de trabajo que afectan a diferentes colectivos, como las camareras de piso. Además, se recuerda que los salarios están creciendo un 1,1% anual.
