Uno de los "éxitos" que se destacaron durante el balance del primer año de legislatura es el proyecto Smart Island Mallorca, con el que buscan modernizar Mallorca a través de iniciativas inteligentes. El presidente del Consell Miquel Ensenyat aseguró que se trata de "un gran reto" y un esfuerzo importante para el departamento.

El presupuesto es de 8,8 millones y los objetivos son "mejorar la calidad de vida" y "dinamizar la actividad turística". Entre algunas de las iniciativas destacan el sistema de iluminación inteligente de los túneles, con lo que se consigue un uso más eficiente de la electricidad. También se incluye la instalación de paneles que darán información sobre el estado de los aparcamientos en carreteras sin salida.

La transparencia, otro de los puntos que se trató ayer como uno de los objetivos del Consell, mejorará al incluirse un portal de datos, además de otro de participación ciudadana.

Las paradas de bus también se verán beneficiadas por Smart Island Mallorca. Las de la mayoría de municipios de Mallorca serán inteligentes cuando dé a luz este proyecto.

Asimismo, se trabajará en la implantación de edificios inteligentes. Para eso, se harán las primeras pruebas en el edificio emblemático de Raixa.

A todo esto hay que sumarle los beneficios que sacarán los servicios de emergencias gracias a un sistema que colaborará en las tareas de salvamento.