Josep Zaforteza, abogado del expresident del Govern Jaume Matas y para el que el fiscal solicita 5 años de cárcel, denunció ayer ante la Audiencia el agravio comparativo de su cliente con los exalcaldes de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, y de Valencia, Rita Barberá, y el expresidente de la Generalitat valenciana Francisco Camps que ordenaron contratar a Iñaki Urdangarin y no han sido acusados o la exvicepresidenta del Govern Rosa Estarás, que también firmó actas falsas de Illesport y solo ha sido testigo. Zaforteza también negó que Matas hubiera contratado, entre 2003 y 2006, a Iñaki Urdangarin "por ser vos quien sois", sino "por su prestigio y experiencia en el deporte internacional".

Zaforteza hizo un brillante informe para rebatir las tesis del fiscal anticorrupción Pedro Horrach y el abogado del Govern Luis Segura, que acusan a Matas de malversación, falsedades documentales, prevaricación y fraude. El expresident del Govern admite solo el fraude y la prevaricación y rechaza la malversación y las falsedades. Zaforteza pide una pena de 1 año y 7 meses de cárcel para su defendido, sustituibles por una multa de 45.000 euros.

Autonomía delictiva

El defensor cargó contra el arrepentido José Luis-Pepote Ballester, exdirector general de Deportes del Govern. Ballester responsabilizó a Matas de dar la orden de contratar a Urdangarin costara lo que costara y de forzar, en 2007, el pago a Nóos de unos 400.000 euros por el foro de 2006, unas facturas que el arrepentido no quería abonar porque no se habían realizado todos los trabajos.

"El señor Ballester cometió una serie de hechos delictivos, muchos sin la intervención de Matas, tenía, por así decirlo, autonomía delictiva. Ballester quería satisfacer a su amigo Iñaki Urdangarin, hacer lo que fuera para favorecerle".

"La iniciativa de contratar a Urdangarin partió de Ballester y no de Matas. Ballester le traslada a Matas la conveniencia de hacer un evento similar al de Valencia", añadió Zaforteza.

El abogado también insistió en que el exministro de Medio Ambiente desconocía entonces que Nóos no era una entidad sin ánimo de lucro y "no sabía que Iñaki Urdangarin y Diego Torres buscaban hacer un negocio".

El abogado rechazó que su defendido hubiera incurrido en malversación "ni cuando ordenó contratar el foro (el primer Illes Balears Fórum de 2005), ni cuando ordenó pagar (en 2007) las facturas de 400.000 euros del segundo foro".

"Los acusados reconocen hechos y no calificaciones jurídicas, no es una conformidad -aseveró el penalista- Matas ha reconocido todo menos lo de los 400.000 euros". Zaforteza también enumeró una serie de circunstancias que deben contribuir a rebajar la condena de su cliente: "el esfuerzo inmenso vender su piso (el palacete, que ha comprado una empresa extranjera por 2,8 millones) y gracias al cual ha consignado aproximadamente 900.000 euros para la reparación del daño; el llevar 8 años imputado por el Palma Arena; tener retirado el pasaporte; haber sufrido dos registros en su casa; y haber perdido el trabajo en Estados Unidos por la prohibición de salir de España.