Antoni Manchado, exsenador socialista y antiguo director general de Tecnología del Govern de Francesc de Antich entre 2007 y 2011, negó ayer que se hubieran desviado fondos públicos en varios contratos de Multimèdia Illes Balears, la empresa pública de la que era consejero delegado y que se dedicó a preparar la implantación de la TDT en las islas.

Manchado, que en las pasadas elecciones del 20-D fue candidato del PSIB al senado y no salió elegido, declaró ayer como investigado ante la juez Ana María San José, que instruye el caso Multimèdia.

El exedil del PSOE de Calvià fue interrogado sobre varios expedientes de contratación de Multimèdia, que la fiscalía anticorrupción estima pudieron dar pie a la comisión de los delitos de fraude a la Administración, prevaricación y malversación de caudales.

Entre los expedientes destaca el contrato que Multimèdia firmó con la productora Video U, implicada después en varios casos de corrupción con UM y de la que se demostró era propiedad, a través de testaferros, de Maria Antònia Munar y Miquel Nadal. Vídeo U tenía que contactar con los Ayuntamientos de las islas para que cedieran suelo donde ubicar las antenas repetidoras de la TDT.

Vídeo U contrató para esas gestiones al también exedil socialista de Calvià Francisco Cano, que cobró unos 2.400 euros al mes durante un año por gestionar la firma de 35 convenios entre el Govern y Multimèdia.

Plazos ineludibles

Manchado, defendido por Pablo Martín, aseguró que el contrato con Vídeo U era necesario porque había unos plazos ineludibles para el apagón de la televisión analógica y Multimèdia carecía de personal para hablar con todos los Ayuntamientos y agilizar los convenios.

Cano, en su día, señaló a la juez que él no se ocupó de los temas técnicos de las antenas, labor que hicieron los ingenieros del Govern. Manchado explicó que Vídeo U era entonces una empresa cualificada para ese cometido.

Otro de los expedientes investigados fue la realización de un informe sobre la sanidad y las nuevas tecnologías. El exalto cargo del Govern de Antich también defendió la corrección de aquel estudio, del que aseguró fue útil.

Multimèdia también suscribió un contrato menor con Vídeo U, cuya conveniencia fue destacada por Manchado. Miquel Oliver, el director entonces de Vídeo U, declaró en enero del 2015 como imputado en este sumario y manifestó que el trabajo se realizó correctamente y de acuerdo al encargo recibido de la empresa pública.

Manchado no quiso hacer declaraciones en los pasillos del juzgado: "todo lo que tenía que decir lo he dicho ahí dentro delante de la juez". El exsenador, no obstante, aseguró estar convencido de haber demostrado su inocencia y la ausencia de irregularidades.

No llevaba contratos

El exsenador manifestó a la juez San José y a la fiscal anticorrupción Ana Lamas que él no se ocupaba de las cuestiones administrativas y de contratación de Multimèdia. En la causa ha declarado como imputada Gianniely Cucci, la exgerente de la empresa pública.

Video U contrató a Francisco Cano porque era una persona muy conocedora del funcionamiento de las administraciones locales (Ayuntamientos) y porque en esa época estaba en el paro, según declaró Miquel Oliver. Cano no es especialista en nuevas tecnologías y regentaba un comercio textil.

Según Francisco Cano, su trabajo consistió en contactar con Ayuntamientos y otras instituciones de las islas para preparar la llegada de la TDT y establecer una red de antenas públicas. Él no se ocupó de cuestiones técnicas porque ya había expertos en la materia en el Govern y Multimèdia.

La fiscalía anticorrupción denunció este caso ante los juzgados tras recibir un informe del anterior Govern del Partido Popular, que se personó como acusación.