Un Francisco Camps prepotente se desmarcó ayer totalmente ante el tribunal que juzga el caso Nóos de los proyectos por los que la Generalitat de Valencia pagó 3,5 millones de euros a Iñaki Urdangarin. Camps, no obstante, alabó el trabajo del cuñado del rey Felipe VI para la candidatura de Valencia para los Juegos Europeos de 2010, que nunca se celebraron y por el que Nóos intentó cobrar dos millones de euros a la Generalitat sin justificar sus servicios. "Con lo hecho por Nóos hoy se podrían conseguir los Juegos", aseguró el declarante.

Camps estuvo a punto de ser imputado por el juez José Castro en el caso Nóos, pero su aforamiento como diputado de las Cortes valencianas y el Tribunal Superior de Justicia de esa comunidad lo impidieron.

Como testigo declaró por escrito el 1 de febrero del 2014 y echó balones fuera. Ayer depuso ante la Audiencia de Palma y se mostró arrogante frente a la presidenta del tribunal, Samantha Romero, y el resto de partes, especialmente las acusaciones.

Francisco Camps, doctor en Derecho y con una dilatada carrera en la cosa pública, se permitió incluso ironizar sobre la presencia de la acusación popular en nombre de los exediles socialistas de Valencia. "O sea usted es el PSOE", le espetó al abogado de esa parte como descubriendo un pecado. También le dijo a Virginia López Negrete, de Manos Limpias, que formulaba preguntas "exóticas. Camps imitó al expresident del Govern Jaume Matas en su rol de ignorante total del día a día de la Administración Autonómica, aunque fueran asuntos de varios millones de euros públicos. "El presupuesto de la Generalitat de Valencia es de 16.000 millones al año y el de Cacsa (Ciudad de las Artes y las Ciencias) es de 100 millones al año, es imposible que el presidente conozca los detalles de todo ese dinero", se jactó el testigo.

El expresidente valenciano negó con rotundidad saber nada de los Valencia Summits, unos foros sobre ciudades sede de eventos deportivos por los que Iñaki Urdangarin cobró casi 3,2 millones de euros públicos entre 2004 y 2006.

"Participé en actos protocolarios de los Valencia Summit de 2004 y 2005 y seguramente di un discurso sobre el deporte, pero no me acuerdo de nada más, ni sé nada más de esos eventos".

El declarante negó haberse reunido con la entonces alcaldesa popular Rita Barberá e Iñaki Urdangarin en el Palacio de La Zarzuela y con éste último en ningún sitio.

En lo único que Francisco Camps admitió haber intervenido fue en el proyecto de los Juegos Europeos, una competición olímpica que nunca se había celebrado y que Valencia quería llevar a cabo en 2010.