Los padres podrán solicitar plaza en los colegios a partir del 9 de mayo

El proceso de admisión para los alumnos del segundo ciclo de Infantil (tres años), Primaria y Secundaria empezará el 9 de mayo y acabará el 20. La solicitud se puede entregar físicamente en el centro marcado como primera opción por las familias o bien cumplimentarla y hacerla llegar a Educación utilizando el proceso telemático. Las primeras listas provisionales de admitidos se harán públicas el 6 de junio.

Plazos de presentación

Dicha información se hizo pública ayer en el BOIB. La resolución firmada por el director general de Planificación, Centros y Ordenación, Antoni Morante, señala también los plazos del proceso de adscripción, que son el paso 'automático' del alumnado que acaba una etapa educativa y accede a otro centro ya adscrito (del colegio al instituto; de la 'escoleta' al colegio...).

Las solicitudes del proceso de adscripción de Primaria y ESO podrán empezar a entregarse el próximo día 18 y la lista de admitidos se presentará el 10 de mayo.

Bachillerato se rige por otros plazos. En el caso de la adscripción, las solicitudes se podrán presentar a partir del 6 de junio y la primera lista de admitidos se publicará el 17 de ese mes. El periodo de admisión en Bachillerato empezará el 20 de junio y los nombres de los admitidos se conocerán el cuatro de julio.

Zonas escolares

Además de estos calendarios, la resolución dada a conocer ayer recoge una novedad respecto a los cursos precedentes: la modificación de las zonas escolares de Palma, que pasan de ser tres a cuatro. La zona más amplia, la C, abarcaba aproximadamente desde las Avenidas hacia fuera (hasta el límite con Llucmajor) y para el próximo curso se ha dividido en dos.

Al hacer más zonas en Palma, se reduce su tamaño ¿Por qué Educación ha tomado esta decisión? El objetivo de la Conselleria es que los alumnos acudan a centros próximos próximos a su domicilio y favorecer una distribución equilibrada del alumnado nouvingut.

Cabe subrayar que la proximidad del domicilio o el puesto de trabajo respecto al centro es lo que más pesa en la baremación establecida para puntuar las solicitudes y repartir las plazas demandadas. Pero esa proximidad es bastante relativa teniendo en cuenta el tamaño de las zonas escolares.

La mayoría de municipios tienen una única zona. Aparte de Palma, en Mallorca tienen más de una zona escolar Pollença, Manacor y Marratxí. Cabe recordar además que en los municipios de Sa Pobla, Inca y Manacor todos los colegios concertados y públicos han llegado a un acuerdo de escolarización para distribuir al alumnado inmigrante, con el objetivo de garantizar un reparto equitativo de estos estudiantes recién llegados y evitar las 'escuelas gueto'.

Otra de las medidas adoptadas por Educación para alcanzar este equilibrio es que todos los colegios públicos y concertados deban reservar un mínimo de plazas para estos estudiantes.

Como ya publicó este diario, según la orden de Admisión firmada por el conseller March los colegios deberán reservar hasta acabar el periodo de matrícula extraordinaria (en septiembre) un mínimo de cuatro plazas y un máximo de cinco por clase en los grupos de niños de tres años (primer curso del segundo ciclo de Infantil) y un mínimo de cinco plazas y un máximo de siete por clase en los cursos sucesivos para los alumnos con Necesidades Específicas de Apoyo Educativo (NESE), categoría que incluye al alumnado nouvingut, así como a los estudiantes con necesidades especiales (con discapacidad psíquica, por ejemplo) y a los niños superdotados. En Balears, comunidad receptora de inmigración, los estudiantes de otros países u otras regiones españolas representan a la mayoría de estudiantes NESE del sistema.

Educación aumenta así las plazas reservadas para estos estudiantes y el tiempo que deben estar bloqueadas, ya que según la normativa hasta ahora vigente (un decreto de 2012 del exconseller del PP Rafael Bosch) los centros solo debían bloquear tres plazas para alumnos NESE en todos los cursos educativos y solo hasta junio.

Según Educación el 79% del alumnado inmigrante acude a la enseñanza pública y el 21% restante asiste a la concertada. El objetivo de los cambios introducidos en el proceso de escolarización de cara al curso que viene persiguen que haya un reparto más equilibrado, en un momento además en que está volviendo a repuntar el alumno nouvingut y las incorporaciones tardías. Coincidiendo con los años de la crisis, la llegada de inmigración se frenó y bajó los niveles de población escolar.