En las aguas de Balears se ha pasado en dieciséis años, entre los años 2000 y 2016, de 62 especies de peces amenazados a 54, según se destaca en el Libro Rojo de los Peces de las Islas Balears, que fue presentado ayer.

Este trabajo es una versión ampliada de la Lista Roja de Peces de las Islas Balears publicada en el año 2000 y ha sido realizado por técnicos de la conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca del Govern balear.

Respecto al inicio del siglo XXI se conocen 15 especies de peces más en aguas de Baleares, por lo que "las cosas van un poco mejor," gracias a las políticas de conservación del mar balear, destacó el conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, con ocasión de la presentación de este libro. El conseller explicó que Balears dispone en estos momentos de "una mejor reglamentación pesquera y de un sistema ejemplar de reservas marinas y espacios naturales marinos que, en estos momentos, es lo mejor del Mediterráneo en cuanto a proporción de superficie protegida".

Los autores del estudio han analizado los factores generales que afectan tanto a los peces de agua dulce como a los marinos, que son la inmensa mayoría, han valorado la evolución de los factores que amenazan este grupo zoológico y han rehecho las fichas de cada una de las especies.

Pescados raros

En sus conclusiones ofrecen un sistema de registro de datos de pescados raros, identifican las zonas que requieren más protección, proponen iniciativas para la reducción de capturas accidentales y la protección específica de los selacios y hacen un llamamiento a la colaboración de administraciones y particulares en la protección de los pescados.

Este libro está disponible en la web de la conselleria y se han editado unos pocos ejemplares en papel. Su publicación es el punto de partida para una política activa de conservación y recuperación de la fauna marina, que requerirá en los próximos años proyectos y actuaciones concretas, comentó Vidal.

El conseller subrayó que la protección de la fauna marina es tan importante, como mínimo, como la de la fauna terrestre, aunque tiene una tradición más limitada. Los autores son Antoni M. Grau, Joan Mayol, Joan Oliver, Francesc Riera y Maria I. Riera, jefes y técnicos de de la conselleria y una consultora externa.