El presidente de la Asociación de Promotores de Balears (Proinba), Luis Martín, alertó ayer de que existe una "gran escasez de vivienda" en las islas y aseguró que "la administración tiene que trabajar en ello para que las viviendas sean las suficientes para cubrir la demanda".

"Estamos cerca de que se convierta en un problema grave", advirtió Martín en una comparecencia pública en la que explicóque la situación afecta sobre todo a la clase media y los más necesitados, con unos 15.000 demandantes de vivienda social cuando la oferta de VPO es "prácticamente inexistente".

Atendiendo a la esperanza de crecimiento de la población en Balears, que el Instituto Nacional de Estadística cifra en unos 3.500 habitantes al año entre 2015 y 2029, los promotores estiman que la demanda de vivienda nueva se sitúa en unas 1.100 unidades anuales, cuando las promociones previstas son 400 para todo este ejercicio.

Las transmisiones de vivienda que se producen en Baleares son unas 1.000 mensuales y el remanente de vivienda nueva es de entre 2.000 y 3.000 viviendas nuevas, con lo que "prácticamente no queda", dijo Martín.

Según los promotores, la demanda se ha reorientado hacia la vivienda de segunda mano, que ha supuesto el 75 % de las trasmisiones en 2015, y se redirige hacia el alquiler, lo de que deja la solución "en manos de grandes operadores".

El presidente y el vicepresidente de Proinba se han puesto a disposición de las administraciones para intentar paliar esta situación con nuevas soluciones habitacionales, estudiando modificaciones en las alturas y densidades permitidas y reactivando promociones con problemas de tramitación.

Martín recalcó que Balears, por el incremento de población y la escasez de suelo, "está abocada a que la vivienda sea un bien escaso y caro, lejos de la capacidad de acceso de la clase media", por lo que es necesario acometer una legislación urbanística consensuada a largo plazo, a unos 40 años vista, y es "urgente" que la administración actúe. En el caso de la vivienda social, el presidente de Proinba explicó que mientras la administración está apostando por obtenerla de la SAREB y los bancos, esa solución es "a corto plazo".

"Proponemos que sea la administración la que destine un pequeño stock para atender a ese colectivo pero que sea en alquiler, no en venta, para que sea un patrimonio que la administración puedan mantener", detalló el vicepresidente de Proinba, José Luis Guillén.

En cuanto a la "tremenda demanda de clase media", propuso agilizar y favorecer la rehabilitación, reformar los planeamientos urbanísticos para permitir mayores densidades y alturas en casos puntuales, y reactivar grandes proyectos estancados.