Julita Cuquerella, la antigua secretaria personal de Iñaki Urdangarin, ha declarado esta mañana en el juicio del caso Nóos que ella realizó compras a través de la tarjeta visa de la sociedad Aizoon. Aclaró, sin embargo, que ella no disponía físicamente de dicha tarjeta, sino únicamente de la información privada y gracias a ello se le permitía realizar compras.

Cuquerella ha desvelado que el marido de la Infanta le financió la contratación de dos mujeres que se encargaban de limpiar su domicilio partícular. Estas trabajadoras de hogar, que eran familiares, cobraban un sueldo de unos 600 euros al mes, fueron dadas de alta en Aizoon, aunque nunca trabajaron para esta empresa, sino únicamente en el domicilio particular de la secretaria de Urdangarin. La secretaria dijo que era una forma de compensarle el aumento de horas debido a que tenía que trabajar más horas y a veces en un horario nocturno, porque su jefe ya se había marchado a trabajar para Telefónica en Washington.

Julita Cuquerella también ha diho que era ella quien discriminaba los gastos que se encargaban en Aizoon o se consideraban personales de Urdangarin, por lo que no se declaraban. Esta información la facilitaba al contable Marco Tejeiro. También ha confirmado que las nóminas de los empleados se pagaban en metálico. Tejeiro realizaba un cheque, lo cobraba en un banco y el dinero se lo entregaba a la secretaria, que ha asegurado que se limitaba a entregárselos a Urdangarin o a meterlos en un cajón.

La secretaria ha asegurado que nunca recibió ningún tipo de orden u indicación de la infanta Cristina.