El juicio del caso Nóos se retomará mañana con la incógnita de si el asesor fiscal de Iñaki Urdangarin, Miguel Tejeiro, guardará silencio sobre temas clave obligado por el secreto profesional o hará revelaciones determinantes para el devenir del proceso, como esperan las acusaciones.

El pasado viernes se produjo un punto de inflexión en la vista por el debate entre la defensa de Diego Torres, socio de Urdangarin, y las acusaciones sobre si Tejeiro está obligado a callar porque asesoró a los socios de Nóos como abogado o si, por el contrario, tiene el deber de testificar todo lo que sabe respecto a los delitos que se les atribuyen.

Ambas partes se acusaron de coaccionar a un testigo que, como demostró lo enconado de la disputa, resulta importante para la Fiscalía y Manos Limpias (que le retiró su acusación) y una amenaza para las defensas del marido de la infanta Cristina y su socio.

El alcance que, a juicio de Tejeiro y del abogado que le asesora, tengan los límites entre lo patrimonial y lo personal respecto a lo que él sabe de Urdangarin y Torres condicionará el curso del juicio.