-Una mujer al frente de un consulado importante de un país árabe. ¿No es muy habitual?
-En mi país hay una nueva generación de mujeres con cargos de responsabilidad. Hemos llegado aquí donde estamos por nuestro trabajo, competencia y seriedad. La mujer en Marruecos desempeña un papel importante, cada vez mayor. Hay mujeres embajadoras, tenemos a cuatro ministras en nuestro Gobierno, el 17% de nuestro Parlamento es femenino y casi 7.000 cargos municipales también son mujeres.
-¿Marruecos es la excepción en temas de igualdad en el mundo árabe?
-Nuestro Jefe de Estado, el rey Mohamed VI, tiene unas ideas muy modernas y es quien está impulsando que las mujeres tengan relevancia en la sociedad. De hecho, él siempre dice que nuestro país no puede avanzar sin las mujeres. Le faltaría una pierna, ya que somos más del 50% de la población.
-El rey Mohamed VI criticó con dureza el trabajo de los cónsules y ordenó un traslado general. ¿Qué pasó?
-Es verdad que en julio de 2015, con motivo de la Fiesta Nacional, nuestro Rey sacó el tema de los consulados en su discurso. Él cuando viaja habla con la gente. Nuestros conciudadanos se le quejaron de que algunos cónsules, por supuesto que no todos, no hacía bien su trabajo y el ministro de Exteriores cambió casi el 70% de los responsables consulares. No obstante, quiero decir que mi predecesor, Mohamed Harit, hizo un gran trabajo en Balears y ahora ha sido destinado a la embajada en Madrid porque allí necesitaban de su experiencia.
-Usted no lleva velo.
-No. Y eso que soy hija de un imán. El Islam de Marruecos es abierto y tolerante. Mi padre, que era un gran conocedor del Islam, nunca impuso a sus hijas la manera de vestir. Mis hermanas en los años 60 fueron a la universidad y se vestían como querían sin ningún tipo de presión por parte de mi padre. También militaban en el Partido Socialista. Es por ello que tenemos un Islam específico de Marruecos, gracias a la figura del Rey que también es el líder de los creyentes.
-En Mallorca ha habido polémicas por los velos de las chicas árabes en los colegios.
-Sí, lo sé. Debemos ser justos. El hecho de ponerse velo o no debe ser una decisión personal tomada en libertad. Siempre digo que no tengo ningún problema con las chicas que escogen con libertad llevarlo. Lo que realmente me molesta es que este velo sea impuesto por otras personas y, sobre todo, por los hombres. Si es una elección personal la respeto porque es su cultura y creo que todos deberíamos respetarlo. El problema no es el velo en sí mismo. Es la idea que trasmite de que quien lo lleva es una mujer sumisa y sin libertad.
-¿Cuántas personas forman la comunidad marroquí balear?
-En nuestros registros tenemos a unas 24.000 personas inscritas. No obstante, sabemos todos que somos muchos más. Creemos que pueden ser alrededor de unos 45.000. Se trata de gente que trabaja mucho, que contribuye al desarrollo económico de Mallorca y que paga impuestos. Por desgracia, solo salen en la prensa los casos de delincuentes. Pero no se debe ser injusto con esta gente por prejuicios. Es verdad que muchas mujeres han venido a cuidar de sus hijos y de sus maridos, pero tenemos un número importante de mujeres que ha venido a trabajar. La inmigración marroquí en España se ha feminizado mucho en los últimos años.
-¿Los 26.000 no inscritos están en situación irregular?
-Hemos puesto en marcha una campaña para que la gente venga a inscribirse, ya que con solo 24.000 personas desde Rabat nos consideran un pequeño consulado y tenemos menos medios. No quiere decir que todos ellos estén sin papeles, pero se puede dar el caso de que muchos niños no se inscriban porque al padre le dé pereza pagar unos cinco euros por cada uno de ellos, que es lo que vale la inscripción. Quizás muchos de mis conciudadanos todavía no conocen que nosotros estamos en el Consulado para ayudarles y tratar de solucionar sus problemas.
-¿Le molestó que en la encendida de luces de Navidad del ayuntamiento de Palma se hablara de la autodeterminación del pueblo saharaui?
-Me molestó muchísimo. Por desgracia hay un grupo de personas que están manipulando a la sociedad mallorquina, y española en general, pidiendo ayudas para los que llaman nuestros hijos y nuestros hermanos de los campamentos que viven en condiciones inhumanas. Aquí solo se habla de una versión de los hechos y no se conoce la otra parte. En un conflicto siempre hay dos versiones y Argelia está jugando un papel muy importante para desestabilizar a mi país. Quisiera dejar claro que la gente de los campamentos viven rodeados por el ejército argelino y no tienen ningún derecho a la participación política. Hace 40 años que no hay elecciones y no pueden expresar sus opiniones. La cúpula de los que pretenden representar a los saharauis [Frente Polisario] llevan 40 años mintiendo a la gente y prometiendo un estado que nunca verá la luz.
-En Mallorca el sábado se organizó un acto solidario en favor del Sahara.
-Quiero hacer hincapié que nosotros queremos que haya una salida para la pobre gente que está en Sahara secuestrada y explotada con el objetivo de conseguir más ayudas. Sé que se organizó este acto para recoger material para los campamentos. Los mallorquines son muy generosos, pero tienen que saber que estas ayudas no llegarán a la población saharaui. Los productos recogidos se están vendiendo en mercados de Mauritania, de Mali o de Argelia.
-¿Usted ha podido constatarlo?
-Que las ayudas se venden en los mercados y no llegan a los campamentos no lo digo yo. Lo explican informes de la Unión Europea, de ACNUR o del Programa Alimentario Mundial. Por este motivo, yo no quiero que la gente de Mallorca sea engañada. Nada me gustaría más que todo lo que se recoge en este tipo de actos fuera para la gente de los campamentos, pero no es la realidad. Es por ello que no dejan entrar a gente de Naciones Unidas o de otras organizaciones para hacer un censo y saber cuántas personas viven en los campamentos.
-¿En su opinión cuál es la solución para el Sahara?
-Hay un proceso en marcha en Naciones Unidas y lo que se debe conseguir es una posición neutra si queremos llegar a una solución. Lo que pedimos es lo mismo que quiere la comunidad internacional: Una solución política que dé estabilidad a la zona y que sea aceptada por todo el mundo. Marruecos ha evolucionado en su propuesta y se ha ofrecido un proyecto de regionalización avanzada donde los saharauis podrían elegir a sus representantes y gestionar su propia economía.
-¿Cómo observa la fobia que hay en Europa a lo árabe por el terrorismo de Estado Islámico?
-El terrorismo representa una amenaza a la paz internacional. En Marruecos también hemos sufrido este terror en 2003 en Casablanca. Hace unos días se cumplieron 12 años del 11M y yo quisiera aprovechar para dar mi más profundo pésame a las familias de las víctimas. Al mismo tiempo, debo decir que dos terceras partes de las víctimas del terrorismo islamista son musulmanes. Por consiguiente, no es solo un ataque contra los occidentales. Mi país ha elaborado una estrategia global contra el terrorismo, no solo desde el punto de vista de seguridad. Se ha puesto en marcha un programa de crecimiento de los recursos humanos para integrar a las personas más débiles y marginadas en el desarrollo económico, con cooperativas para crear puestos de trabajo o pequeños negocios.
-En Europa se generó temor cuando en su país empezó a gobernar la izquierda islamista.
-Uno de los principales capitales de Marruecos es la estabilidad, gracias en gran parte a nuestra monarquía. De todas formas, mi país tiene especificidades diferentes al resto de naciones árabes. Todos sabemos lo que ha ocurrido en Egipto, Túnez, Libia o Siria con las Primaveras Árabes. Sin embargo, en Marruecos los islamistas ya estaban representados en el Parlamento desde hace muchos años y como en toda democracia llegaron al poder en 2011. Formaron Gobierno liderando una coalición que no ha alterado en nada el país. La ventaja de Marruecos es que trabajamos en el marco de una constitución y existe un gran equilibrio entre los diferentes poderes.
-¿Qué proyectos tiene para acercar Mallorca a Marruecos?
-Estoy aquí para trabajar al servicio de mis conciudadanos y ayudarles a arreglar sus problemas y papeles, pero también mi función es ayudar a mejorar la imagen de Marruecos en Baleares. Me parece que la gente tiene muchos clichés y no se conoce realmente lo que está pasando en Marruecos y los avances económicos de la nación. Hay muchas posibilidades de inversión en mi país, de hecho hay 800 empresas españolas trabajando en Marruecos. Tenemos relaciones estratégicas entre España y Marruecos, ya que no podemos cambiar ni la historia ni la geografía. Somos la misma región.
-¿Ya ha puesto en marcha alguna iniciativa encaminada a conseguir esta cooperación?
-Bueno, estamos negociando la posibilidad de crear una línea aérea directa entre Palma y Marruecos. Es un tema muy importante para nosotros, ya que ello facilitaría el intercambio de turismo y también la presencia de empresas que puedan desarrollar proyectos económicos que generen riqueza. En estos momentos necesitamos 12 horas para ir de Mallorca a Marruecos y un vuelo directo facilitaría mucho la comunicación.
-¿Ya ha hablado con las autoridades isleñas de ello?
-El Govern de Balears ya conoce esta iniciativa y en estos momentos estamos hablando con una aerolínea inglesa que opera en Mallorca para impulsar un vuelo directo con periodicidad semanal. Al mismo tiempo, queremos que nuestro ministro de Turismo venga a la isla, ya que estamos en la misma región del mundo y se podrían crear paquetes turísticos conjuntos para los visitantes de Asia o América.
