Los líderes populares a nivel autonómico están limando asperezas. No obstante, en algunas juntas locales de los pueblos se libra una auténtica guerra civil entre los militantes y ello puede convertirse en un escollo importante para conseguir la paz social en el partido hegemónico de Balears y alcanzar el consenso para una lista única. En Inca, Marratxí o Andratx existe un importante enfrentamiento y las juntas locales están divididas por cuestiones que han traspasado el ámbito político y han llegado al tema personal.

A esta situación hay que añadir que en las islas menores, Eivissa y Menorca, también existen diferentes corrientes y con escasa sintonía entre ellas.

En Inca nos encontramos con un duro enfrentamiento entre los partidarios del expresidente del Parlament, Pere Rotger, y los del exalcalde Rafael Torres. Las implicaciones de ambos en el caso Over, con las correspondientes declaraciones responsabilizando al otro, minaron una amistad personal y política. Se habla de que las divergencias entre ambos son irreconciliables. Por consiguiente, un entente para apoyar a una corriente dentro del partido a nivel autonómico es, en estos momentos, del todo impensable.

En Marratxí también existe una notable división. En este caso, la marcha del exalcalde Tomeu Oliver, al perder las elecciones, dejó un vacío de poder. El presidente de la junta local del PP sigue siendo José Ramón Bauzá y los partidarios del expresident del Govern y los contrarios a sus postulados se diputan liderar la formación en la localidad. Un conflicto que ha generado más de una tensión y las posturas están muy separadas.

En Andratx, en las últimas semanas ha habido un acercamiento entre el exalcalde Llorenç Suau y el actual primer edil Jaume Porsell. Suau ha pasado a ser asesor de Porsell, después de que este último lo hubiera descabalgando como candidato. Este enfrentamiento les llevó a tener sus más y sus menos y crear una fragmentación en la junta local.

Tres vías en Manacor

En Manacor se habla de que existen hasta tres vías diferentes y el actual alcalde, Pedro Rosselló, alineado con Bauzá, tiene dificultades para controlar las corrientes de su propio partido.

En otras localidades también existen diferencias, especialmente entre los que se han alineado con los críticos y los que han seguido apoyando a los oficialistas de José Ramón Bauzá. Lo que ocurre es que los escarceos no han sido tan acusados como en estas localidades importantes.

Si en Mallorca la situación del PP está muy fragmentada, en Menorca y en Eivissa no le van a la zaga. En Menorca el expresidente del Consell y actual diputado, Santi Tadeo, lidera una corriente más próxima al sector crítico de Biel Company. En la parte contraria nos encontramos con la alcaldesa de Alaior y también diputada, Misericòrdia Sugranyés, y el parlamentario Antoni Camps.

En Eivissa ocurre lo mismo entre los partidarios del expresident Vicens Serra y el exconseller José Vicente Marí, actual presidente del partido, y la línea que lidera el exalcalde de Sant Antoni de Portmany, Josep Sala.