Los baleares son cada vez más pobres frente a sus vecinos europeos. El mito de las islas ricas se desmorona cuando se analiza la mediocre evolución que su riqueza per cápita esta registrando y que se refleja en el último informe elaborado por Eurostat (el INE europeo) sobre la situación de las 276 regiones de la UE: el producto interior bruto por habitante del archipiélago se ha colocado ya por debajo de la media europea cuando en 2011 todavía se situaba ligeramente por encima.
Los datos aportados por Eurostat reflejan la pérdida de riqueza que los ciudadanos de Balears llevan sufriendo durante los últimos años en relación a su entorno. En 2007, cuando la crisis no se intuía, el producto interior bruto per cápita medio en paridad de poder de compra del archipiélago era de 28.400 euros, lo que situaba a los isleños con una riqueza un 13,8% superior a la media de la Unión Europea, en unas fechas en las que la media española quedaba un 5% por encima del nivel de la UE. En 2014, último ejercicio del que Eurostat acaba de publicar los datos, esa riqueza media de los isleños ha bajado hasta los 26.200 euros, lo que la coloca ya un 4% por debajo de la media europea.
El problema radica en que la riqueza media de los europeos se ha incrementado en ese periodo a un ritmo apreciable (ha pasado de los 24.900 euros anuales a 27.500), lo que implica dejar atrás a las islas.
El director de la Fundación Impulsa y el que fuera máximo responsable del desaparecido Centre de Recerca Econòmica (CRE), Antoni Riera, aporta un dato aún más demoledor: antes del año 2000, Balears se situaba entre las 50 regiones más ricas de la Unión Europea. En 2014, ha caído ya al puesto 121 de un total de 276. Y añade otro igualmente significativo: en precios constantes, el PIB medio de la UE se ha incrementado entre los años 2000 y 2014 un 13,4%, mientras que el de Balears ha acumulado un descenso del 18.3%. La conclusión siempre es la misma: el ciudadano de Balears es cada vez más pobre frente a sus socios europeos.
Según el informe de Eurostat sobre el PIB regional en la UE, se trata de una enfermedad que ataca al conjunto de España. En 2007, el PIB per cápita en paridad de poder de compra se situaba como media del país en 26.200 euros, un 5% más que la media europea, mientras que en 2014 se situó en 25.000 euros, un 9% por debajo.
Los datos de 2014 muestran también que hace ya tiempo que Balears ha abandonado los puestos de cabeza dentro de España por lo que a riqueza media se refiere, pese a mantenerse todavía ligeramente por encima de la media estatal. En 2014, la autonomía más rica fue Madrid, con un PIB per cápita de 34.300 euros (8.100 más que el del archipiélago), lo que la coloca un 25% por encima de la media de la UE. El segundo lugar se queda para el País Vasco, con 32.700 euros y un 19% más que esa media europea. A continuación aparecen Navarra (30.900 euros y un 13% por encima de la UE) y Cataluña (29.700 euros y una ventaja del 8%). Este es el único grupo que puede hacer gala de presentar una situación de ventaja dentro de Europa. Al mismo nivel de la media de la UE, aproximadamente, aparecen Aragón (27.600 euros) y La Rioja (27.500).
El resto de comunidades entran ya en el apartado de ´más pobres que la media europea´. Y es aquí cuando aparece Balears, con sus ya mencionados 26.200 euros de 2014). El puesto de cola se queda para Extremadura, con 17.300 euros anuales.
La situación española, incluida la de sus regiones más ricas, poco tiene que ver con los puestos de cabeza en el seno de la UE: en la zona oeste de Londres, ese PIB per cápita se eleva hasta los 148.000 euros, lo que multiplica por cinco la media europea. En segundo lugar aparece Luxemburgo, con 73.000 euros, casi el triple, que en el conjunto de la UE, y en tercero el distrito de Bruselas, con 57.000 euros.
Como regiones más pobres de la Unión aparecen la búlgara Severozapaden, con 8.200 euros, es decir, menos de un tercio de esa media europea, seguida de Mayotte, una isla del ultramar francés situada en el canal de Mozambique, con un PIB per capita de 8.400 euros.
Las causas del retroceso
¿Qué esta pasando en Balears para registrar semejante retroceso? La respuesta que dan Antoni Riera y el profesor de Economía Aplicada de la UIB Javier Capó es la misma: la economía isleña está perdiendo productividad. O lo que es lo mismo, muestra un uso intensivo de recursos humanos pero genera con ellos una riqueza cada vez más limitada.
Este es precisamente uno de los aspectos que se ha estado analizando durante el último año por la Fundación Impulsa y sobre el que ya hay un diagnóstico hecho: esa perdida de productividad afecta a todos los sectores de la economía balear, según subraya Riera. No se salva ni uno.
Javier Capó destaca igualmente la creciente dependencia de la actividad turística, que se caracteriza por el citado uso intensivo de mano de obra, pero de baja cualificación y de bajos salarios. Y ningún otro sector da el relevo.
Por contra, destaca la pérdida de peso que se ha registrado en la industria balear que en su opinión debería especializarse en actividades que no se vean afectadas por el coste de transporte que conlleva su insularidad, como el diseño o la informática.
Incluso el sector financiero, que se caracteriza por contar con un alto porcentaje de trabajadores de cualificación alta, ha registrado fuertes recortes de personal, que en Balears se han hecho especialmente evidentes tras la fusión de Sa Nostra en BMN, según recuerda el profesor de la UIB.
