Cada año por estas fechas el Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans (SEPC) llama a la manifestación y a la huelga. Este año, se mantiene el mismo motivo que propició la convocatoria de 2015: la LOMCE, que sigue vigente y sin fecha de derogación -con un Gobierno central aún en el aire-; y la reforma universitaria del 3+2, que propone cambiar la estructura de cuatro años de grado y uno de máster (4+1) a una de tres años de grado y dos de máster.
Ambas iniciativas continúan en marcha y los estudiantes de distintas ciudades de España salieron a la calle ayer para expresar su rechazo a ellas, al considerar que suponen un modelo poco equitativo de la enseñanza obligatoria y una mercantilización y encarecimiento de la formación universitaria.
En Balears, un total de 7.283 alumnos hicieron huelga ayer, lo que roza el 20% del total de alumnado de segundo ciclo de Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional. En Mallorca, 6.130 estudiantes secundaron el paro y algo más de 400 se congregaron en la conocida como 'plaza del tubo' para marchar hasta la conselleria de Educación.
En esta ocasión, y a diferencia de lo ocurrido en otras ciudades, aquí la huelga no fue convocada en la Universitat. La protesta contó con el apoyo de CCOO, al considerar que la LOMCE "ataca la enseñanza pública".
Marina Perelló, portavoz del SECP, explicó que el 3+2 implica reducir la formación básica a tres años más dos de especialización, con lo que será más caro recibir formación superior ya que los másteres son más caros. Respecto a la Ley Wert, y según señaló megáfono en mano frente a la sede de Educación, lamentó que "protege" a la religión cristiana, "algo que no se puede entender en un país laico"; criticó que en 3º de ESO ya haya que elegir el itinerario a seguir así como las reválidas de ESO y Bachillerato.
Respecto a la fecha elegida -en pleno debate de investidura y tras el festivo del 1 de marzo- Perelló aseguró que ha sido una casualidad y que siempre se hecho una jornada de protesta por estas fechas. La portavoz indicó que aunque la manifestación se centraba en el 3+2 y en la LOMCE, no olvidan "los recortes y el aumento de las ratios".
La jornada empezó con una serie de piquetes en institutos como el IES Josep Maria Llompart, Pius XII o el Medina Mayurqa. En algunos centros, como el Ramon Llull o el Arxiduc Lluís Salvador, no les dejaron entrar. A las doce del mediodía se concentraron en la 'plaza del tubo', donde encendieron una traca que quemó una tumba de cartón hecha para el 3+2 y la LOMCE. De ahí los estudiantes partieron hasta la sede de Educación, en un marcha que transcurrió sin incidencias.
La cabecera portaba una pancarta con el lema 'contra Europa 2020 y la LOMCE, desobediència'. Durante la marcha se oyeron consignas como 'som estudiants i no mercaderies'; 'fora les empreses de la universitat'; o 'per l'educació, acció directa'.
