El Govern ha reaccionado ante la amenaza de una tractorada delante del Consolat de Mar, que ya está ultimando el sector agrario isleño. Ayer el conseller de Medio Ambiente y Agricultura, Vicenç Vidal, y la consellera de Hacienda, Catalina Cladera, anunciaron el incremento de las ayudas agrarias para hacer frente a la sequía. Las subvenciones directas para la compra de comida pasarán de 1,5 a dos millones y, además, se ponen en marcha toda una serie de créditos blandos que van de 3.000 a 60.000 euros por agricultor mediante la Sociedad de Garantía Recíproca Isba.
Vidal negó ayer en rueda de prensa que estas medidas habilitadas en los últimos días tengan nada que ver con la amenaza de una manifestación con maquinaria agrícola. "No son por el miedo a una tractorada. Se trata de medidas excepcionales ante una situación grave de sequía y de la que somos conscientes", apuntó.
La consellera Cladera explicó que los créditos blandos irán de 3.000 a 60.000 euros para las explotaciones individuales y hasta 100.000 euros en el caso de Sociedades Agrarias de Transformación (SAT) y de cooperativas. Tendrán un año de carencia a un interés a 1 año de 2,5 bonificado por el Govern. Asimismo, de los gastos de apertura y del aval se hará cargo el Govern. Habrá un total de 8 millones para repartir en este tipo de préstamos.
Asimismo, se pondrá en marcha una campaña de semillas certificadas de 300.000 euros y se incrementará la campaña de aportación de alfalfa para las ganaderías de vacuno de leche que dejaron de regar a cambio de una cuota de alfalfa. Se les facilitará hasta 1.714 toneladas de este producto para alimentar a las reses.
De 1,5 a 2 millones de euros
El incremento de las ayudas directas era una de las principales peticiones del sector. Los 1,5 millones de euros iniciales, durante tres meses, eran considerados "calderilla" para el sector en función de los daños devastadores de la sequía sobre los cultivos. Ahora esta cantidad se amplía hasta los dos millones y se prolonga hasta los 4 meses.
El conseller Vidal aseguró que con estas ayudas se conseguirá cubrir la alimentación del ganado en un 40% hasta que pasen los efectos de la sequía. De esta forma, se dará una ayuda de 9,20 euros para ovejas y cabras, 50,60 euros para vacas lecheras y vacuno en régimen extensivo y 13,8 para porcino en extensivo. Estas cantidades son para los ganaderos profesionales. Para la ganadería en tiempo parcial la ayuda va de 8,05 euros por oveja, 44,2 para el vacunos y 12 euros para los cerdos. Desde las organizaciones agrarias indicaron que todavía no han tenido tiempo de estudiar las nuevas medidas, pero de entrada apuntaron que las ayudas se incrementa medio millón de euros, aunque también el plazo se alarga un mes más, lo que querrá decir que el dinero por cabeza de ganado será el mismo.
La reacción del Govern, después de un intenso tira y afloja de Medio Ambiente y Agricultura con Hacienda, ha sido rápida. El Ejecutivo conocía que el campo estaba preparando movilizaciones importantes y, tal y como adelantó este periódico, a finales de esta semana organiza un ensayo para mostrar su poder de convocatoria.
El conseller Vidal explicó que ha sido necesario habilitar dinero de todas las conselleries para poder hacer frente a estas medidas especiales. Quiso agradecer el esfuerzo de todo el Govern y su sensibilidad ante una situación excepcional como es la sequía.
