Ana María Tejeiro, esposa de Diego Torres y exjefa de personal del entramado societario Nóos, apenas declaró ayer por espacio de un minuto. "No son ciertos los hechos que se me imputan", contestó, entre sollozos, a su abogado Manuel González Peeters.

La fiscalía anticorrupción únicamente imputa a Tejeiro un presunto delito de blanqueo de capitales, por el que le solicita una pena de 2 años de prisión y multa de 961.000 euros. Manos Limpias, la acusación popular, le atribuye un rosario de delitos, por los que reclama casi 20 años de privación de libertad.

La acusada se negó ayer a contestar a las preguntas de las acusaciones y defensores, salvo su abogado. Peeters solamente le formuló tres cuestiones: si conocía los hechos que se le imputan, si son verdad y si ella tenía capacidad de gestión o de decisión en Nóos, algo a lo que también respondió negativamente.