El conseller de Educación, Martí March, aseguró ayer en el Parlament que desde su departamento descartan expedientar a la profesora del IES Josep Maria Llompart por calificar con un nueve un vídeo de un alumno que, según censuraron el PP y organizaciones ultracorservadoras, "insulta a los católicos" y "ridiculiza al colectivo homosexual".

Durante la Comisión de Cultura, Educación y Deportes, March señaló que "personalmente" no le gusta el vídeo y que entiende que haya "sectores que se sienten atacados", pero "no va a llevar a cabo una caza de brujas" en el instituto, ya que considera que "con su bachillerato artístico" llevan a cabo "una buena tarea".

La profesora del IES Josep Maria Llompart calificó con un sobresaliente el trabajo titulado Soy maricón, un vídeo musical de tono provocador cuyo protagonista, en su actuación, interpretado por el mismo autor, reivindica su condición sexual y critica a la iglesia y al obispo por su postura contra el colectivo gay.

En referencia a la petición del PP para apartar de la docencia a la profesora, March aseguró que su "trayectoria" es "correcta" y añadió que "aunque hubiera sido un error gravísimo no se puede juzgar solo por un hecho concreto 20 años de trayectoria". Según expresó, tras llevar a cabo una investigación de los hechos, "a la profesora, se le ha dicho que a la hora de evaluar no solo tenga en cuenta el aspecto técnico, sino también los contenidos".

Por su parte, el diputado del PP Antoni Camps aseveró que el vídeo supone una ataque contra "la religión católica" que "podría constituir un delito" y que dirían lo mismo si el ataque hubiera sido "contra el budismo". "No se puede permitir que en un colegio público pasen estas cosas", aseguró para después preguntar: "¿Si esto queda impune, que más puede pasar?".

Camps señaló que March le ha "defraudado" porque a pesar de que lo consideraba como "el conseller más moderado" ha demostrado "el mismo nivel de radicalización que sus compañeros". La Asociación de Políca Familiar pidió la inmediata dimisión del conseller por amparar un delito.