La delegada del Gobierno rechazó ayer comparecer ante la comisión de Asuntos Institucionales del Parlament al considerar que la Cámara balear no es competente para controlar o fiscalizar su trabajo. En un escrito dirigido a la presidenta del Parlament, Xelo Huertas, Palmer expone sus razones para negarse: la "falta de ajuste" de la petición de comparecencia con "la normativa vigente", ya que se trata de un cargo del Gobierno central y no de la Comunidad Autónoma.
En 2011, el entonces delegado del Gobierno, el socialista Ramon Socías, también rechazó comparecer en el Parlament a petición del PP con el mismo argumento.
La comparecencia de Palmer había sido solicitada por Podemos para pedirle información sobre los recursos que el ministerio de Justicia destina al juzgado de Violencia sobre la Mujer de Eivissa. En su carta a Huertas, la delegada del Gobierno expone que el Consejo de Estado considera que "el control político de las Asambleas Autonómicas ha de entenderse referido a su ámbito territorial y competencia, de modo que dichas funciones se circunscriben a fiscalizar las actuaciones de sus órganos de gobierno y administración". Palmer cita también una sentencia de 2005 del Tribunal Constitucional pronunciándose en el mismo sentido.
