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Epidemia

Zika, un virus benigno que puede ser letal para los bebés

Jordi de Otero, internista de la Clínica Juaneda, asegura que tres de cada cuatro infectados no muestran síntomas de enfermedad

Un mosquito de la variedad Aedes aegytpi, el cual transmite el virus del zika, dengue y chikungunya.

"El problema del virus zikaviruszika es que se está extendiendo muy rápidamente por un área, todo el centro y el sur de América, que no es la suya original. Lo conocemos desde hace varias décadas pero no había ocasionado mayores problemas hasta que en los años 2013 y 2014 ocasionó unos brotes en varias islas del Pacífico -Polinesia Francesa, Nueva Caledonia, Islas Cook, Isla de Pascua- y en África, sus zonas naturales. Pero ahora ha saltado a América, donde ha ocasionado varios brotes importantes en varios países. Esto ha llevado a la OMS a establecer una alerta antes de dilucidar si este virus puede ser un problema de futuro o no", reflexiona Jordi de Otero, internista especializado en enfermedades tropicales de la Clínica Juaneda.

Este especialista recalca que el zika se comporta de forma bastante benigna con casi todo el mundo excepto con los nonatos ya que se cree que produce en el feto un retraso en la formación del cerebro. "El cráneo se adapta al cerebro y al parecer el virus está originando casos de microcefalia en los bebés cuando afecta a mujeres embarazadas. Y estamos hablando de una malformación mortal de necesidad. Un bebé que nazca con ella puede sobrevivir tan solo desde unos pocos días a unas semanas", advierte el doctor De Otero.

Preguntado sobre si está demostrado que el zika esté detrás de estas microcefalias en los recién nacidos, el internista responde que, de manera científica, aún no lo está pero "tenemos un aumento de casos de microcefalia y malformaciones en el sistema nervioso de recién nacidos que coincide con el área de expansión del virus. Se ha establecido una relación temporal pero todavía no está clara la relación causal", matiza.

El especialista señala que su área de expansión es muy extensa pero que se dan paradojas como que haya zonas de México como la Riviera Maya que estén libres del zika o que también esté presente en el sur de los Estados Unidos, pese a que no se informa mucho de este hecho. "Está siendo más problemático en Brasil, donde ya hay dieciocho Estados afectados y hay una horquilla de entre 440.000 y 1,3 millones de personas infectadas durante el pasado año, y en Colombia, donde ya se han confirmado 578 afectados y hay otros 3.700 casos sospechosos hasta la fecha", aporta cifras el internista.

De Otero revela que este virus cursa con síntomas en tan solo una de cada cuatro personas infectadas y que estos son, básicamente, fiebre baja, dolor de cabeza y de las articulaciones y, en ocasiones, un sarpullido cutáneo. Preguntado sobre si esta última manifestación permitiría diferenciar una infección por zika frente a otra ocasionada por un virus gripal más común, el especialista concede que esta erupción cutánea "es más frecuente en un caso de zika que en una gripe aunque cualquier virus también puede provocar estos sarpullidos".

"En cualquier caso, se cura solo en un plazo de entre cinco días y una semana tomando paracetamol y líquidos", tranquiliza el doctor De Otero, que apunta que solo en algunos casos puntuales se ha descrito que provoque otros problemas neurológicos, entre el que cita el síndrome de Guillain-Barré y que describe como una reacción inmunitaria del organismo ante la presencia de este agente extraño que daña el sistema nervioso. "Puede llegar a ser grave. Comienza con una debilidad en las piernas que es ascendente y que puede llegar a ser muy invalidante porque te impide caminar con normalidad pero que afortunadamente tiene tratamiento farmacológico", revela.

Invierno cálido y seco

Preguntado sobre las posibilidades de que se dé en las islas un caso autóctono de una persona infectada por el zika sin haber viajado a las zonas de riesgo, el especialista asegura que es altamente improbable. "En primer lugar necesitas un tipo de mosquito que sea compatible con el virus, que es el Aedes. De esta clase aquí solo tenemos el mosquito tigre (Aedes albopictus) como posible vector, pero también la climatología tiene que ser acorde a la de Sudamérica donde se está extendiendo. Es cierto que estamos teniendo un invierno muy suave, pero también que está siendo muy seco y eso impide que el insecto tenga zonas de cría", razona.

Además, continúa el internista, el virus está presente en la persona infectada entre 3 y 12 días como máximo, que es cuando debería ser picada por un mosquito que así tendría posibilidades de trasmitirlo a otra persona sana. Y tendría que haber un volumen importante de personas infectadas con el virus latente en una época del año en el que el mosquito está activo para que las posibilidades de trasmitirlo a un mallorquín que no haya viajado a las zonas de riesgo aumentaran. "Y todas estas circunstancias no se dan en estos momentos", recalca el especialista, que aboga por incidir más en la protección frente a las picaduras de las personas que vayan a ir a las zonas de riesgo.

"Lo típico: Camisas y pantalones largos, no usar ni ropa oscura ni perfumes que los atraigan y usar repelentes con un mínimo de un 35% de DEET (ingrediente más habitual de los antimosquitos). Aquí cabría recordar que incluso las embarazadas pueden usar repelentes con hasta un 50% de esta sustancia", concluye el internista.

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