El Juzgado de Instrucción número 3 de Manacor ha abierto juicio oral contra un oficial de policía de Sant Llorenç des Cardessar acusado de amenazar, hostigar y vejar a un subordinado, a quien, según la Fiscalía y el propio afectado, gritaba de forma permanente, instaba a realizar funciones ajenas a su puesto y controlaba con llamadas constantes mientras que, en presencia de otros compañeros, llegó incluso a proferir que se lo iba "a cargar".

En concreto, el Ministerio Público reclama 15 meses de cárcel para el procesado por un presunto delito contra la integridad moral, mientras que la acusación particular, ejercida por el agente perjudicado, solicita hasta 12 años de prisión por el mismo tipo penal además de coacciones, lesiones y obstrucción a la justicia.

Asimismo, el agente pide ser indemnizado con 300.000 euros en concepto de responsabilidad civil. Las acusaciones señalan que los hechos comenzaron a producirse en 2010 y llevaron al policía a requerir de terapia y medicación ante el fuerte deterioro de su salud.

En su escrito de acusación, el letrado del agente afectado relata cómo la cordialidad y amistad que ambos mantenían desde 2006 devinieron, de forma repentina, en constantes "humillaciones y vejaciones" por parte del oficial "con el único ánimo de menoscabar y lesionar la integridad moral y la salud psíquica" del efectivo policial.