La portavoz de Podemos, Laura Camargo, señaló que con la aprobación del decreto ley de medidas urgentes en materia urbanística "se ha conseguido acabar con la barra libre para hacer de Baleares un parque urbanizable sin ningún tipo de control".
Camargo dijo que su "valoración es positiva" y que la normativa se "ha aprobado tras numerosas negociaciones", dejando claro que los podemistas aprobarán la preceptiva convalidación del decreto en el Parlament para que cobre firmeza su vigencia.
Todo lo contrario, el PP censuró la "aprobación de este nuevo 'Armengolazo' que pone en evidencia, una vez más, cuáles son las formas de este Govern". Su portavoz Marga Prohens denunció que la legislación impulsada por el PP "se modificn con nocturnidad y de espaldas a los sectores afectados". Los hechos, precisó Prohens, demuestran que "la radicalidad democrática de la que presume Armengol se queda solo en radicalidad, con cero transparencia, cero diálogo y mucha imposición". La diputada popular alertó de que las nuevas medidas tendrán "unas consecuencias económicas muy importantes", y criticó que "una vez más se muerde la mano que da de comer a mucha gente en esta Comunidad".
"No se puede decir que se dialoga y después hacer lo mismo que decían que hacía el anterior Govern, un decreto ley; están utilizando los mismos instrumentos que empleaba Bauzá", lamentó por su parte el presidente de El Pi, Jaume Font, para quien esta "figura se puede usar para temas puntuales, pero si esto era tan urgente se tenía que haber hecho hace cuatro meses".
En cuanto a las patronales, la Agrupación de Cadenas Hoteleras aseguró que el nuevo decreto ley supone "un freno" al proceso de reposicionamiento de las zonas maduras de los últimos años, con el que se había conseguido "cambios en las tendencias en las zonas maduras ya declaradas de Playa de Palma y Calvià".
En esta misma línea, la presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FHEM), Inmaculada Benito, mostró su rechazo porque las modificaciones aprobadas por el Govern "denotan, una vez más, la ausencia de una política turística global en Balears y una elevada improvisación, sin tener en cuenta las consecuencias que tendrán en la economía y, por tanto, para el interés general". La modificación de la ley Delgado "demuestra", según los hoteleros, "la falta de visión por parte del Ejecutivo del sistema turístico y el no reconocimiento de la intersectorialidad que esta industria presenta".
Por su parte, la CAEB tachó de "desacierto y un paso atrás" la nueva normativa del Pacto.
