El expresident del Govern del PP Jaume Matas no planteará el lunes ninguna cuestión previa en la primera sesión del juicio del caso Nóos y confía en salir absuelto de un asunto a priori muy enrevesado para él. A pocos días del inicio de la vista oral la posibilidad de un acuerdo Matas-fiscalía anticorrupción se presenta muy remota, mientras que el exministro de Medio Ambiente ha recuperado parte de sus facultades auditivas gracias a una satisfactoria intervención.
La fiscalía reclama para Jaume Matas once años de cárcel y el pago, junto a otros acusados, de una indemnización al Govern de unos 2,5 millones de euros por el caso Nóos. Según el fiscal Pedro Horrach, el entonces president del Govern Jaume Matas se plegó a los deseos de Iñaki UrdangarinIñaki Urdangarin y ordenó a sus subordinados, cuatro de los cuales también están acusados, que se le diera dinero público para proyectos sin interés para el bien común.
El fiscal Pedro Horrach imputa al acusado la comisión de varios desvíos de fondos públicos, relacionados con los dos foros sobre turismo y deporte que, entre 2005 y 2006, organizó Iñaki Urdangarin en Palma. Horrach también le responsabiliza del amaño de contratos públicos en favor del yerno del rey Juan Carlos y relacionados con el patrocinio por el Govern del equipo ciclista Illes Balears.
La fiscalía agrupa todos los hechos y pide para el también exministro de Medio Ambiente ocho años de prisión y 20 años de inhabilitación absoluta por un delito continuado de malversación de caudales públicos, vinculado a otros continuados de prevaricación y falsedad de documento público. También se le atribuye un delito continuado de fraude a la Administración, por el que se le solicitan 3 años de cárcel y 10 años de inhabilitación especial.
No le afecta la doctrina Botín
Los defensores de Matas, Josep Zaforteza y Miquel Arbona, no van a formular cuestiones previas ante la Audiencia, ya que no estiman que se haya producido ninguna vulneración de derechos fundamentales o anomalías procesales de especial trascendencia.
La doctrina Botín sería de imposible aplicación al expresidente del PP balear, dado que es acusado por fiscalía, Govern balear (acusación particular) y Manos Limpias (acusación popular).
El caso Nóos es una pieza separada del sumario Palma Arena, donde Matas ya ha sido condenado en otras dos ocasiones y en el que nunca ha alegado vulneración de sus derechos fundamentales durante el proceso.
Matas ya ha sido condenado en las dos ocasiones en que ha sido juzgado: una por tráfico de influencias en favor del periodista Antonio Alemany y otra por recibir un cohecho de manos de un hotelero, que contrató a su mujer como relaciones públicas.
El expolítico conservador cumplió condena en la cárcel de Segovia por el tráfico de influencias, pese a que la pena impuesta contra él era de tan solo 9 meses de privación de libertad.
A diferencia de la mayoría de los 18 acusados en Nóos, el exministro de Medio Ambiente se ha limitado a expresar su discrepancia con los delitos que le imputan anticorrupción, Manos Limpias y el Govern balear, pero no ha aportado ninguna razón en contra.
Sin embargo, una de sus principales líneas de defensa va a ser, a la luz de los testigos que propuso y que han sido rechazados en su práctica mayoría, que los seminarios organizados por Urdangarin tuvieron un interés científico y fueron útiles para la sociedad balear.
Matas se acogió a su derecho a guardar silencio cuando fue citado a declarar por el caso Nóos, pero en su primera comparecencia por el caso Palma Arena sí que sostuvo ante el juez que los foros organizados con fondos del Govern por el instituto Nóos habían sido beneficiosos para Balears.
Acosado por los exaltos cargos
Las principales pruebas que la fiscalía posee contra Matas son los testimonios de los dos acusados arrepentidos que ya han sellado un pacto de conformidad: el exdirector general de Deportes José Luis-Pepote Ballester y el antiguo contable de Nóos Marco Tejeiro.
Tres exaltos cargos del Govern -Juan Carlos Alía, Gonzalo Bernal y Miquel Àngel Bonet- pueden unirse a los acuerdos con el fiscal Pedro Horrach, lo que complicaría mucho la situación de Matas.
El exdirigente del Partido Popular en Balears, en declaraciones a medios de comunicación, justificó el apoyo a los proyectos de Iñaki Urdangarin en que éste era el duque de Palma, miembro de la Familia Real y yerno del rey Juan Carlos y él no se podía negar a sus iniciativas, ni menos decirle que se presentara a un concurso.
La buena noticia para Matas es que ha recuperado parte de su muy mermada capacidad auditiva, gracias a una satisfactoria operación quirúrgica.
