Representantes de PSOE, Més y Podemos celebraron ayer una reunión con varios consellers del Govern con el fin de agilizar la puesta en marcha del impuesto turístico y la derogación de las medidas legislativas del Govern de José Ramón Bauzá por las que se desprotegía el territorio. El encuentro, celebrado en el Parlament, volverá a repetirse el viernes para acabar de consensuar el alcance de paquete territorial. A la reunión de ayer asistieron el vicepresidente y conseller de Turismo, Biel Barceló, y los consellers de Presidencia, Marc Pons; Territorio, Joan Boned; Agricultura, Vicenç Vidal y Servicios Sociales, Fina Santiago.
En lo que se refiere al impuesto turístico, el acuerdo esta cerrado y la idea del Ejecutivo es aprobarlo de manera "inminente" en el Consell de Govern, según explicó Biel Barceló (Més), al salir de la reunión de ayer. Barceló prevé reunirse el jueves con los sectores que han presentado alegaciones a la propuesta del Govern, entre ellos los hoteleros, para concretar las sugerencias que el Ejecutivo está dispuesto a incorporar.
Aunque el vicepresidente no quiso concretar más, entre los partidos del Pacto se da por hecho que el Govern podría aprobar la ecotasa este mismo viernes o, como muy tarde, el viernes de la próxima semana, para tramitarla después en el Parlament por la vía de urgencia con el fin de que entre en vigor lo antes posible.
Mientras que en el caso del impuesto turístico el acuerdo entre los partidos del Pacto para su redacción final está prácticamente cerrado, en lo que se refiere a las medidas territoriales existen divergencias respecto al alcance que debe tener la paralización de la normativa urbanística aprobada por el Govern del PP incluida en leyes como la de Agricultura y, en especial, la Ley Turística impulsada por Carlos Delgado. Es esta última la que ha provocado más discrepancias entre los partidos que integran el Ejecutivo (PSOE y Més) y sus socios de Podemos en el Parlament, dado que estos consideran que la paralización debe ser más profunda que la consensuada por los partidos del Govern.
En principio, el socialista Joan Boned tenía previsto que el pasado mes de diciembre se aprobara la moratoria de los artículos más polémicos de la normativa urbanística del Govern de Bauzá, con el fin de quedaran en suspenso mientras se consensúa una nueva redacción. Sin embargo, diciembre pasó sin que se presentara esta medida cautelar, provocando críticas de Podemos por el retraso.
Ampliación de hoteles
Aunque la conselleria de Territorio, encargada de esta moratoria, está en manos del PSOE, la leyes afectadas se refieren especialmente a departamentos bajo el control de Més. Donde más desacuerdos han surgido ha sido en el alcance de la suspensión de la Ley Turística. Así, el texto que habían consensuado PSOE y Més, deroga gran parte de las medidas urbanísticas incluidas en la Ley impulsada por Delgado, pero mantiene la posibilidad de que se amplíen hoteles, lo que supone aumentar la planta hotelera, a pesar de tratarse de uno de los aspectos criticados por PSOE y Més en la pasada legislatura.
El texto con el que trabaja el Pacto sí incluye cuestiones como dar marcha atrás a que hoteles de zonas maduras puedan aumentar sus plantas, así como las facilidades para campos de golf o de polo en suelo rústico. Sin embargo, el mantenimiento de la posibilidad de ampliar hoteles recibió las críticas de Podemos, que considera que la moratoria debe afectar también a este aspecto. Al final, el Pacto acordó ayer celebrar una nueva reunión el viernes ya que el objetivo es no retrasar mucho más tiempo esta cuestión y que el Govern apruebe el decreto ley de medidas cautelares este mes.
