El nuevo presidente del Consell Consultiu, Antoni Diéguez, que tomó ayer posesión de su cargo en el Consolat de Mar, aseguró que accede al puesto "para ser el primer servidor" de esta institución con "el reto" de "mantener la independencia" de este órgano, "defender el sentido común y la legalidad y ser garante de la misma".

Diéguez hizo estas declaraciones durante la celebración de su toma de posesión y de la nueva secretaria del Consultiu, Maria Ballester. El acto estuvo presidido por la presidenta del Govern, Francina Armengol y por la del Parlament, Xelo Huertas. Además, acudieron distintas autoridades como el vicepresidente del Parlament, Vicenç Thomàs, la consellera de Servicios Sociales, Fina Santiago, la delegada del Gobierno en Baleares, Teresa Palmer, el expresidente del Consell Consultiu, Rafael Perera, así como otras autoridades políticas, sociales y militares.

El Grupo Parlamentario Popular consideró ayer que el nombramiento de Antoni Diéguez como presidente del Consell Consultiu es "un atentado contra la independencia política que debe tener una institución" como es la del superior órgano de consulta de Balears