El Consell Consultiu niega, en un escrito remitido al juez José Castro, que en la tramitación y elección de ponente del dictamen sobre el hospital público de Son Espases elaborado en 2006, y a petición del entonces president del Govern Jaume Matas, se hubiesen producido anomalías. Según el máximo órgano consultivo de las Administraciones de Balears, la solicitud de Matas no se cursó con mayor celeridad porque no tenía el marchamo de urgencia y se realizó en plenas vacaciones estivales.

Los silencios, las vaguedades y las lagunas del Consell Consultiu sobre cómo se repartió, en agosto del 2006, la consulta del Govern de Jaume Matas relativa al concurso para adjudicar el hospital público de Son Espases han exasperado al juez Castro, que el jueves 10 instó al máximo órgano consultiu de Balears a que aclarase lo ocurrido. Este dictamen conllevó un cambio en la adjudicación de la mayor obra pública de Balears, que inicialmente había ganado Juan Miguel Villar Mir (OHL) y que finalmente correspondió a Florentino Pérez (Dragados)

El juez lleva semanas intentando esclarecer si el fallecido expresidente del Consell Consultiu Miquel Coll Carreras, un jurista muy próximo al president Jaume Matas, despojó a la vocal Carmen Fernández de la ponencia sobre Son Espases para redactarla él. Fernández asegura que personal del Consell Consultiu le comunicó que, por el turno de reparto, entre los siete integrantes del órgano le había tocado a ella la ponencia.

Según la testigo, Miquel Coll no le dio ninguna explicación sobre su decisión. "Yo soy el presidente y tengo libertad para elegir al ponente y he decidido que esta vez seré yo", le vino a decir Coll.

La tónica habitual en esa época era repartir los asuntos entre los siete vocales, siguiendo turnos del uno al siete. Un extremo que rechazó Rafael Perera, vocal en esa época y que fue presidente en funciones cuando Miquel Coll enfermó. Perera mantiene que los asuntos eran adjudicados por el presidente de acuerdo a la especialidad legal de cada vocal y procurando un reparto equitativo.

Once días hábiles

Castro averiguó que la petición de Matas llegó a la sede de la calle Rubén Darío de Palma el 4 de agosto del 2006. Sin embargo, Miquel Coll no pidió la ponencia hasta el día 17 siguiente. El magistrado quería saber qué pasó en esos trece días en que el asunto permaneció inactivo, pese a que la petición del Govern era urgente, dado que el concurso de la mayor obra pública estaba paralizado en espera del dictamen.

La respuesta del Consell Consultiu ha sido que el president Matas no solicitó que el dictamen fuera urgente y entonces se trató como un caso normal. De haber llevado la etiqueta de urgente, la consulta se habría evacuado con mayor celeridad.

El órgano asesor sostiene que pasaron 11 días hábiles entre la entrada del expediente y la asunción de la ponencia por Miquel Coll, un tiempo que no es excesivo dado que aquello ocurrió en pleno agosto, un mes vacacional.

Carmen Fernández ha explicado que en esos días pusieron a su disposición las numerosas cajas con el expediente del hospital público y que incluso llegó a llevarse a casa documentación para empezar a estudiar el caso. Otros vocales del órgano asesor del Govern han rechazado que Coll hubiese postergado a Carmen Fernández para quedarse él con la consulta.

La versión oficial del Consultiu trasmitida al instructor es que la autoasignación por Miquel Coll del asunto de Son Espases no fue irregular, dado que formaba parte de sus facultades como presidente.

El magistrado recabó también al Consell Consultiu las libretas o programas informáticos con los que se hacía el reparto de ponencias y el sistema empleado para el mismo.

Matas había hablado con Coll a finales de julio para informarle de la necesidad de un dictamen sobre las valoraciones de las ofertas realizadas por la consultora externa Global PM (que daba ganadora a OHL). El magistrado no entiende por qué se retrasó tanto la tramitación de la consulta, máxime cuando el concurso de adjudicación estaba paralizado.

Interrogar a dos empleados

En este sentido ha citado, para mañana y como testigos, a dos antiguos empleados del consejo para que expliquen qué ocurrió aquel verano.

El Consell emitió un dictamen en el que aconsejaba que los Colegios profesionales de Economistas y de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos analizaran las valoraciones efectuadas por Global PM. El Govern siguió esa recomendación, lo que originó un vuelco en los resultados y que Florentino Pérez ganase el concurso.