El jefe de recursos humanos del Consell de Mallorca, Miguel Gayà Font, declaró ayer en el juzgado de instrucción 8 por la querella de una técnico contratada por esa institución en el departamento de Medio Ambiente. La trabajadora, representada por el letrado Francisco Pérez, acusa al jefe de varios delitos relacionados con una demanda anterior que presentó contra el Consell para ascender de categoría laboral.

Los hechos se remontan a 2010 cuando un juzgado de lo social pidió a la inspección de trabajo un informe sobre el puesto de la técnico, datos que el magistrado necesitaba para fallar la demanda de la empleada.

Según la querella, Gayà desoyó el requerimiento de la inspección de trabajo para citar a la empleada a una entrevista, a la que sí asistieron dos representantes del Consell. Inspección de Trabajo realizó así su informe sin oír a la interesada, que acabó perdiendo el pleito contra el Consell.

Ayer Gayà, defendido por Carmen de España, manifestó que no citó a la trabajadora a la entrevista porque la inspección, a diferencia de otros requerimientos, no se lo pidió expresamente. El jefe de recursos humanos pensó que la demandante iba a ser emplazada por la inspección de trabajo.

El querellado añadió que el Consell sí cambió de categoría a la trabajadora, aunque no a la reclamada por ésta.