Más allá de la sorpresa que ha supuesto la decisión del juez Juan Pedro Yllanes de entrar en política, los responsables de la Audiencia de Palma pretenden evitar que esta situación pueda alterar el juicio del llamado caso Nóos, aunque se trate del magistrado nombrado para presidir el tribunal. "El juicio se celebrará según el plan programado", es decir, se iniciará el próximo día 11 de enero con la presentación de las cuestiones previas. Así lo anunció ayer Diego Gómez Reino, presidente de la Audiencia de Palma, que reconoció que se enteró por los medios de comunicación de la decisión que había tomado su compañero, si bien más tarde pudo hablar telefónicamente con él y le explicó las razones por las que había decidido abandonar la judicatura para encabezar la lista de Podemos y presentarse a las próximas elecciones como número uno al Congreso.

Aunque esta situación es poco corriente, por cuanto no hay ningún precedente en Baleares en el que un juez de la categoría profesional de Yllanes haya dejado su profesión para entrar en política, los jueces entienden que no existe causa justificada para que pueda afectar al desarrollo normal de este juicio. Gómez Reino detalló que "esta situación está regulada y prevista en la ley", por cuanto puede darse el caso que, por cualquier motivo, un juez no pueda formar sala en un proceso. En este caso, el juez se sustituye por otro compañero para que sean tres los componentes de un tribunal. El hecho de que Yllanes fuera a actuar como presidente en el juicio contra la infanta Cristina no va a suponer ningún problema añadido.

La nueva composición del tribunal la va a decidir la presidenta de la Sección Primera de la Audiencia, la magistrada Xisca Ramis. Cada sección, según explicó Gómez Reino, tiene un sistema interno de organización, dependiendo de las circunstancias que se pueden producir en cada caso. En el juicio Nóos hay tres personas que podrían incorporarse al tribunal, todas ellas mujeres. Además de Ramis, podrían entrar las magistradas Rocío Martín o Genma Robles. En cualquier caso esta decisión no se adoptará hasta final de semana, una vez que el Consejo General del Poder Judicial se pronuncie sobre la petición de Yllanes de que se le conceda una excedencia, tras su decisión de dedicarse a la política.

Aunque la confirmación será cuestión de días, nadie duda de que dicha excedencia será aprobada. De hecho, Gómez Reino dijo ayer que no veía ningún motivo por el que no se fuera a aceptar la petición de su compañero, por cuanto "es un derecho fundamental querer participar en las elecciones". El magistrado no quiso adelantar el nombre del tercer integrante del tribunal del caso Nóos, si bien señaló que la presidenta, Xisca Ramis, está pendiente de un concurso de traslado, por cuanto tiene previsto solicitar plaza en otro juzgado. Sin embargo, en fuentes jurídicas se señaló ayer que Ramis estaría dispuesta a prolongar su permanencia en la Audiencia, sobre todo en estos momentos especiales que conlleva la celebración del juicio del caso Nóos.

Aunque es cierto que Gómez Reino no intuía la inesperada decisión de su compañero, ayer reconoció que, "tal como está el panorama" y sobre todo, "por el conocimiento a Juan Pedro, que es un hombre muy activo", la decisión no le ha sorprendido. Y aprovechó la situación para destacar la profesionalidad del magistrado que abandona la judicatura, con el que compartió tribunal durante mucho tiempo, ya que ambos coincidieron en la Sección Segunda de la Audiencia. "Yo lo siento mucho porque es un gran compañero y una gran pérdida para la Audiencia, pero le deseo lo mejor", señaló.

Sin embargo, la decisión de Yllanes de entrar en política sí sorprendió a la mayoría de jueces de Mallorca, que en ningún momento se imaginaron que el juez fuera a encabezar una candidatura del partido Podemos. "Me parece sorprendente. Me costaba encajar políticamente a Yllanes, pero nunca hubiera dicho que era simpatizante de Podemos".

El magistrado que renuncia a presidir el juicio más importante que se ha celebrado en la última época en Mallorca apenas comentó esta situación a las personas más íntimas. Yllanes, además de Gómez Reino, también comunicó su decisión, una vez ya conocida por los medios de comunicación, al presidente del Tribunal Superior de Justicia de Balears, Antoni Terrassa, y a la magistrada Xisca Ramis, que preside la Sala en la que él forma parte.

Fue a la Audiencia

Yllanes ayer se acercó a última hora de la mañana al Palacio de Justicia. A su entrada le esperaban los medios de comunicación. Prefirió no hacer declaraciones. Hasta que formalmente no se desvincule de su condición de magistrado, que no será hasta el próximo jueves, no va a realizar ninguna declaración sobre los motivos por los que ha decidido dar este paso que ha sorprendido a la mayoría de sus compañeros, tanto por el hecho de que decida dedicarse a la política, como por aceptar ser la cabeza de cartel de Podemos. Al magistrado se le vio junto a sus compañeros Diego Gómez Reino y Carlos Gómez, con los que coincidió en el patio de la Audiencia.

Todos sus compañeros coinciden en su formación técnica y en su dedicación profesional. Sin embargo, también apuntan que últimamente se sentía "defraudado" por la difícil situación laboral que padecen los jueces, tanto por el exceso de trabajo como por la falta de medios, y parecía que necesitaba afrontar un nuevo reto profesional.