La Guardia Civil arrestó ayer a tres inmigrantes que presuntamente llegaron a Formentera desde Argelia a bordo de una pequeña embarcación, de unos tres metros de eslora. Los hombres fueron trasladados a Eivissa, donde estaba previsto que fueran entregados a la Policía, por entrar en España de forma irregular.

Eran aproximadamente las nueve de la mañana de ayer cuando un vecino de la zona de ses Platgetes, en el Caló de Sant Agustí, presenció la llegada de una pequeña embarcación de fibra, de la que desembarcaban varios hombres. Este vecino alertó a la Guardia Civil, que se movilizó ante la posibilidad de que se tratara de un grupo de inmigrantes irregulares.

Cuando llegaron al lugar en el que habían dejado la barca, confirmaron este extremo. En su interior había varios bidones de gasolina, así como restos de comida y botellas de agua con las etiquetas en árabe. Todos los indicios apuntaba a que habían realizado la travesía desde las costas de Argelia.

La Guardia Civil movilizó a sus patrullas de la isla, así como a una embarcación de la Guardia Civil del Mar y un helicóptero. Los agentes establecieron un control especial en el puerto de la Savina, de donde parten los ferrys con destino a Eivissa. Allí interceptaron a tres jóvenes, que iban indocumentados.

De las primeras pesquisas realizadas por la Guardia Civil se desprende que se trataría de los únicos ocupantes de la embarcación. Según todos los indicios, se trataría de ciudadanos argelinos, de entre 20 y 40 años, que habrían aprovechado las buenas condiciones del mar estos días para realizar la travesía, que se puede hacer en unas doce horas.

Los tres hombres detenidos fueron conducidos por la Guardia Civil a las dependencias de Eivissa, con la intención de entregarlos a la Policía Nacional, que se encargará de incoar su expediente de expulsión por haber entrado en España de forma irregular. Aunque inicialemente se apuntó que podría haber viajado más inmigrantes, la Benemérita lo descartó.