El portavoz del Govern balear y conseller de Presidencia, Marc Pons, aseguró ayer que el Ejecutivo presidido por Francina Armengol trabaja ya en "soluciones imaginativas" para superar el conflicto por el complemento de carrera profesional complemento de carrera profesionalque ha llevado a los sindicatos sanitarios a amenazar con una huelga en la semana previa a las elecciones generales del 20 de diciembre. Pons añadió que esas salidas "alternativas" podrían servir para superar el enfrentamiento laboral sin rebasar el límite de gasto público impuesto por el Gobierno Rajoy. "Nos gustaría tener un escenario presupuestario diferente, pero no es así, estamos muy limitados. Tenemos que ser imaginativos y, mirando todas las partidas y recursos, buscar solución", argumentaba Pons.
El conseller y portavoz del Govern no quiso ofrecer detalles de la propuesta, aún pendiente de negociación la próxima semana, pero aseguró que el planteamiento será "transversal", buscando una solución "para todos los trabajadores públicos, no solo los sanitarios". Otras fuentes del Govern y fuentes conocedoras del proceso negociador explicaban horas después a Diario de Mallorca que esa solución "transversal" con la que contentar a médicos y sanitarios no beneficiará precisamente a todos los empleados autonómicos, sino justo lo contrario: el planteamiento en el que trabaja el Govern pasa por ajustar el sueldo a todos para dar una solución a los más beligerantes, los sanitarios.
Según esas mismas fuentes, la idea es reducir el porcentaje de la paga extra de 2012 suprimida por el Gobierno Rajoy que se les devolverá a todos los trabajadores públicos en 2016, y, con ese ahorro, financiar la recuperación de parte del complemento de carrera profesional sanitaria que tiene a todos los sindicatos de Salud en pie de guerra. Las fuentes matizaban que lo que se pretende es dar una solución a medio plazo a todos, que contente de paso a corto plazo a los sanitarios (que además de perder aquella extra, sufrieron la supresión por parte del Govern Bauzá del plus de carrera profesional, insisten siempre sus sindicatos).
Informado de este planteamiento descrito desde el propio Govern a Diario de Mallorca, un portavoz oficial del Ejecutivo Armengol explicaba que lo que se les pone en la mesa a los sindicatos a partir del lunes es que "no va a haber más dinero del que ya hay" para recuperar salarios perdidos, pero se puede discutir el reparto de esa partida. Ahí entrarían en el debate soluciones como la explicada: que todos recuperen menos extra y se pague con lo ahorrado los pluses de los sanitarios. "Pero es algo que han de definir los sindicatos", añaden en el Govern, que quiere que sean los sindicatos los que decidan cómo quieren repartir el escaso dinero que hay dentro de unas cuentas lastradas por el déficit heredado del Govern del PP y por las imposiciones de Madrid. "No estamos dispuestos a que se abra un conflicto en Educación, por dar respuesta al de Sanidad", zanjan. Con lo que los sindicatos tendrán que contribuir a buscar una solución para todos.
"Expectativas de acuerdo"
De estos detalles no había hablado el conseller portavoz durante la rueda de prensa posterior al Consell de Govern de los viernes. Marc Pons explicaba que todas las propuestas debían pasar antes por una mesa de negociación, por lo que solo aceptaba adelantar que lo que se persigue es "un acuerdo con el que se colmen las expectativas de todos". Mostraba además cierto optimismo, tras semanas en las que el conflicto sanitario no ha hecho más que agudizarse. "Parece que ahora hay algunas expectativas de acuerdo, aunque queda mucho trabajo por hacer", abundaba Pons.
Así que la negociación sigue abierta, mientras el Govern perfila los últimos detalles de las cuentas de 2016, que se presentarán el jueves. Pons tampoco adelantó gran cosa sobre ellas, más allá de repetir lo prometido ya por la presidenta Armengol: que los presupuestos "tendrán un fuerte compromiso social" y las "prioridades" con las que se han diseñado pretenden "dar respuesta a quines más necesidades tienen en Balears".
Sobre las presiones de Podemos para definir desde fuera del Govern la asignación de partidas de gasto millonarias, Pons evitó entrar en polémicas y aseguró que las presupuestas se ajustarán " a los acuerdos de gobernabilidad" cerrados con Podemos y Més. Considera por ello que tendrán el respaldo de Podemos y dijo "confiar" en que todos los partidos del Pacto de Govern son "perfectamente conscientes" de la importancia de los presupuestos y no harán un uso partidista de ellos en la campaña que ahora arranca.
