La conselleria de Educación está empezando a perfilar un plan global de mejora de los resultados de los centros educativos, partiendo de la idea básica de darles más autonomía, tanto a nivel académico como de organización. Así por ejemplo quieren darles más margen de maniobra para gestionar sus recursos, incluyendo las plantillas de profesorado; una idea que ya está siendo desarrollada en Cataluña y que genera cierto recelo entre los sindicatos.
Otra idea estaría relacionada con los equipos directivos, buscando que todos tengan un proyecto de dirección, señaló ayer el director general Antoni Morante: "Cada centro hará su plan de mejora", indicó. Según explicó se seguiría una línea similar a la de los contratos programas que se firmaron años atrás con algunos centros, que recibían un extra de financiación para desarrollar un programa de innovación concreto.
Dentro de ese plan global de mejora, y ligada a ese autonomía de acción, tendrá una gran importancia la evaluación del sistema. Y ahí es donde entrará en juego el IAQSE, el Institut d'Avaluació de la Qualitat del Sistema Educatiu, cuya dirección ha asumido Pere Moyà.
Según explicó ayer el conseller March la idea es que este instituto empiece "una nueva etapa de profesionalidad" y que "tras unos años convulsos recupere su buen nombre" a base de "transparencia e independencia". Entre los objetivos que se ha marcadoPere Moyà, profesor y miembro del cuerpo de Inspección desde 1993, está el de elaborar un sistema de indicadores del sistema educativo y "revisar los datos" que se han encontrado ya que "no se fían" de varios: "Algunos no están proporcionados, no se adecúan".
Otra tarea a encarar este curso será hacer público el informe con los resultados de las pruebas de 3º de Primaria que se llevaron a cabo el año pasado en aplicación de la LOMCE. Pese al boicot que generaron -hubo familias que se negaron a que sus hijos participaran- y a la jornada de huelga que se convocó, Moyà cree que los resultados servirán al menos para tener "información global". Precisó que en cualquier caso los resultados se darán a conocer con una finalidad "orientativa e informativa" y nunca para establecer rankings. Además de repetir las de 3º, este año se harán por primera vez las pruebas de 6º que también establece la LOMCE; unas evaluaciones que Moyà quiere "contextualizar y consensar con los centros".
