¿En qué gastará el Govern el dinero de la ecotasa bis? En esta nueva etapa, no lo decidirá unilateralmente el Ejecutivo. Un órgano asesor con integrantes de la Administración y de diferentes ámbitos de la sociedad civil acordará el destino concreto de los ingresos que genere el impuesto sobre pernoctaciones turísticas que se va a implantar en Balears a mediados de 2016.

La ley que regulará la segunda ecotasa contempla la creación de una "comisión de impulso del turismo sostenible", que será la encargada de definir los proyectos que se sufragarán con los fondos recaudados en los alojamientos turísticos. El objetivo ideal que tiene en mente el Pacto es que desde los hoteleros hasta el GOB se sienten en la misma mesa y consensúen esas inversiones finalistas, pero todavía es pronto para saber si esa imagen y entente serán posibles.

En el caso de que lo sea, los empresarios hoteleros y el grupo ecologista no estarán solos; les acompañarán los agentes sociales y económicos, desde sindicatos a otras patronales, así como representantes de los Ayuntamientos, de los cuatro Consells, de las conselleries de Turismo, Hacienda, Economía y Medio Ambiente del Govern, "y de las entidades que se determinen, particularmente las de carácter medioambiental".

La idea de que no sea el Govern en solitario quien aprueba las inversiones de la ecotasa no es nueva; otros gobiernos anteriores, incluido el del PP de Jaume Matas, antes de derogar el impuesto, sometía las propuestas a debate en el Consejo Asesor de Turismo. Sin embargo, el actual Govern quiere dar más voz a colectivos externos para que los proyectos susciten el mayor apoyo posible.

Impuesto finalista

La inclusión de la nueva comisión "responde al interés especial que tiene el Govern de establecer adecuadamente la finalidad a que se deben destinar los recursos obtenidos con la recaudación del futuro impuesto turístico", señalan desde Turismo.

El borrador ya fija los seis ejes o campos a los que se dedicarán los ingresos del gravamen que, cabe recordar, será finalista. En primer lugar, la "mejora de la calidad y la competitividad del sector turístico , fomento de la desestacionalización, creación de producto turístico y promoción turística". En segundo lugar, desarrollo de infraestructuras relacionadas con el turismo sostenible. Otro ámbito será la "protección, preservación y recuperación del medio natural".

La ecotasa también se invertirá en la "recuperación y rehabilitación del patrimonio histórico y cultural", así como al "impulso de proyectos de investigación científica, desarrollo e innovación tecnológica( I + D + I) relacionados con el ámbito turístico o que contribuyan a la diversificación económica". El dinero recaudado debe servir asimismo para la "mejora de la formación y la calidad del empleo del sector turístico".

Cabe señalar que desde el primer momento el GOB se ha mostrado contrario a la filosofía del nuevo Govern, y considera que la ecotasa se tiene que destinar íntegramente a inversiones ambientales y no a mejorar el sector turístico. Los ecologistas consideran que debería ser "un eco-impuesto finalista destinado única y exclusivamente a mejorar el medio ambiente y la presión sobre los recursos naturales derivados de la actividad turística".

La ley estipula que todos los ingresos procedentes del impuesto turístico irán a nutrir el "fondo para el impulso del turismo sostenible", también de nueva creación. El Pacto se marca el objetivo de que este nuevo fondo se convierta en la principal "fuente de financiación de las políticas turísticas encaminadas a impulsar el turismo sostenible , responsable y de calidad en el archipiélago de las Illes Balears".