Fernando Areal puede ser una bomba mortal para el PP balear y nacional si extiende sus pactos con la fiscalía a otros casos donde se investiga corrupción de su antiguo partido, como el de Son Espases, Over o el de la sede central de la calle Palau Reial y él aparece implicado. De forma paralela, el Tribunal de Cuentas deberá decidir ahora, tras la confesión del exgerente del PP insular, si multa con 144.000 euros a ese partido por financiación irregular.

Areal fue, entre 2003 y 2008, gerente del PP de Balears y mantuvo un estrecho contacto y dependencia del PP central. Durante la campaña electoral del 2007 tuvo la condición de administrador general de la candidatura encabezada por su cuñado Jaume Matas, lo que le imponía el no sobrepasar los límites autorizados de gastos en las campañas.

El recaudador del partido

El exedil de Urbanismo de Cort Javier Rodrigo de Santos, condenado por corrupción, ha definido a Fernando Areal como el recaudador "oficial" del partido en las islas. Según De Santos, el cuñado de Matas se dedicaba a pedir comisiones del 3% a todos los proveedores y contratistas públicos, especialmente a los constructores.

Areal sabe todos los secretos de la financiación oculta del PP en esos años y hasta hace muy pocos días negaba con insistencia que su partido hubiese manejado dinero negro.

De hecho, el pasado 18 de septiembre, Areal juró y perjuró ante el juez José Castro, que le interrogó como imputado en el caso Son Espases, que nunca cobró sobornos. "Señoría, por qué no me cree a mí y les cree a los otros", imploró. Pocas semanas después selló un acuerdo con el fiscal Pedro Horrach para declararse culpable de un delito electoral.

Horrach limitó ayer el acuerdo con el extesorero a esta causa, donde había pruebas muy contundentes en contra del acusado. Sin embargo, la experiencia indica que los acusados en sumarios por corrupción buscan pactos globales para salvarse de la cárcel o reducir al mínimo su privación de libertad.

En 2007 la financiación irregular de partidos no era delito (lo es desde el pasado verano), pero sí podía ser sancionada en vía administrativa. Horrach pidió en su escrito de calificación que la sentencia contra Areal sea remitida al Tribunal de Cuentas para que multe con 144.000 euros, el doble del dinero negro manejado, al PP.

Areal traicionó ayer la estrategia defensiva que ha mantenido con su cuñado Matas desde 2010: negar todos los cargos y proclamarse inocente.