Un total de 24.781 titulares de tarjetas sanitarias individuales que ya han caducado o caducarán desde el pasado 1 de octubre hasta final de año podrán ahorrarse los 8,43 euros de la tasa fijada para la renovación de estos documentos ya que podrán seguir utilizando la sanidad pública balear con ellos hasta comienzos del próximo año cuando será derogado este pago, tal y como ya ha adelantado el Govern.

La tarjeta sanitaria individual, una vez caducada, sigue teniendo validez durante los siguientes tres meses. En este periodo de gracia sus titulares pueden seguir utilizándola en sus visitas a su médico de cabecera o al especialista y en los documentos se podrá seguir cargando las medicinas prescritas mediante receta electrónica.

Así, los titulares de estas tarjetas podrán optar entre su renovación, previo pago de la citada tasa fijada para este año, o seguir con el documento caducado a la espera de que en enero de 2016 el Servei de Salut les facilite una nueva tarjeta de forma totalmente gratuita, como se hacía antes de que en enero de 2012 la Administración de José Ramón Bauzá decidiera gravar la emisión de estos documentos con una tasa de carácter autonómico.

Según datos facilitados por el Servei de Salut, la fijación de esta tasa al comienzo de la pasada legislatura permitió al Govern Bauzá recaudar un total de 8.426.017, 29 euros desde enero de 2012 hasta el primer semestre de este año. En estos tres años y medio se renovaron un total de 903.612 tarjetas sanitarias individuales.

Setenta mil más

Y en el tercer trimestre de este año, de julio a septiembre, se han expedido otros 69.819 documentos más desglosados por islas de la siguiente manera: 53.802 en Mallorca, 5.155 en Menorca y 10.862 en Eivissa y Formentera. No obstante, el IB-Salut no pudo precisar el dinero facturado por la emisión de estas tarjetas en este último trimestre mencionado.

Aquí hay que tener en cuenta que la tasa general, fijada en este año en los citados 8,43 euros -al comienzo de su cobro se estableció en diez euros que fueron actualizándose año a año en función del incremento del IPC hasta, curiosamente, este 2015 en el que para el mes de mayo se convocaron las elecciones autonómicas y municipales-, tiene varias excepciones.

Así, para las familias con tres o cuatro hijos, la bonificación en el pago alcanza el 30%, por lo que para estos casos hay que desembolsar 5,90 euros por tarjeta. Las familias con más de 4 hijos se benefician de un descuento del 50%, por lo que solo han de pagar 4,22 euros.

Asimismo están exentos de pagar esta tasa todas aquellas personas que perciben pensiones no contributivas y las perceptoras de rentas mínimas de inserción. Es obligatorio renovar la tarjeta cuando caduque su vigencia de cuatro años, con los citados tres meses de gracia, por pérdida, deterioro o robo o cuando sea necesario actualizar los datos que figuran en ella.

El pasado 1 de julio había activas un total de 1.042.821 tarjetas sanitarias individuales en toda la comunidad autónoma repartidas de la siguiente manera: 820.390 en Mallorca; 84.068 en Menorca; 129.381 en Eivissa y 8.982 en Formentera.