Bartomeu Barceló, fiscal superior de Balears, pidió ayer, en el acto de apertura del año judicial, que "se deje a los fiscales fuera de la contienda política y que no se instrumentalice", su función. Por su parte, Antoni Terrasa, presidente del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) afirmó que la vista oral del caso Nóos, prevista para varias semanas del año próximo, no afectará al ritmo de trabajo de la Audiencia.

Francina Armengol, presidenta del Govern; Teresa Palmer, delegada del Govern; y Fernando Aznar, comandante general de Balears, fueron algunos de los asistentes al acto, que cada año se celebra, de manera rotatoria, en una de las principales islas.

Bartomeu Barceló hizo un somero repaso a la memoria de la fiscalía, que corresponde al año pasado. El fiscal superior destacó que la delincuencia descendió en 2014 en las islas un 4,7%, siguiendo la tónica del año pasado y coincidió con Terrassa en reclamar más medios materiales y humanos para el ministerio público y la justicia en general.

Barceló abogó por "acercar el fiscal al ciudadano" e incrementar la confianza de la sociedad en la fiscalía. También destacó el rol de defensor de la legalidad de la fiscalía dentro de una estricta imparcialidad y gracias a su autonomía. El fiscal superior, frente a las críticas sobre la dependencia gubernamental del ministerio público, reclamó por "dejar al fiscal fuera de la contienda política" y "que no se instrumentalice nuestra función".

Elevada carga de trabajo

Terrasa hizo un breve balance de la justicia balear que en el primer semestre de este año presenta unas estadísticas muy similares a las del mismo período del 2014, en cuanto a asuntos registrados, resueltos y pendientes.

El presidente del TSJB insistió en que algunos jueces de las islas están trabajando con una carga de trabajo muy superior a los módulos medios marcados por el Consejo General del Poder Judicial, lo que se traduce en una merma de la calidad de las resoluciones.

El magistrado recordó, por enésima vez, las carencias de la justicia insular: la sala de lo social del TSJB, que funciona con solo dos jueces titulares y los otros prestados; los juzgados de lo social de Palma, que están señalando juicios para el 2017; los juzgados civiles de Eivissa; los juzgados de lo contencioso y los de lo mercantil.

Respecto a sedes judiciales, el presidente reivindicó más espacio para los juzgados penales y civiles de Palma y sedes únicas para los de Manacor e Inca. "En Eivissa existe un plan de infraestructuras para ejecutar, pero en Ciutadella no tenemos ni plan", se sinceró Terrasa. Sobre el macrojuicio de Nóos, el presidente adelantó que no afectará mucho al resto de causas y que se está a la espera del calendario.