Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Formación Profesional Dual

Formarse trabajando

Sion Vives, de pie, trabajando junto a Rubén Marín en un proyecto. b. ramon

Lo habrán oído mil veces: el 31% de los jóvenes de Balears abandonan los estudios de forma prematura. Rubén Marín estuvo a punto de engrosar ese porcentaje. Segundo de Bachillerato se le atragantó y lo dejó. Trabajó un año de camarero. Y se dio cuenta de que así no quería seguir.

Volvió a los libros, acabó 2º de Bachillerato. Y luego pensó en la Formación Profesional Superior como camino a seguir. Quería estudiar algo relacionado con electricidad, pero no había plazas, así que se apuntó a Desarrollo de Aplicaciones Web en el instituto Francesc de Borja Moll. Le dijeron que podía cursar FP Dual, un modelo experimental desconocido en Balears hasta ese momento. Suponía que casi desde el principio (tras solo seis meses de clase teórica), ya serían contratados por una empresa durante un año y medio. Por la mañana, al trabajo. Por la tarde, al instituto.

Rubén desembarcó en Brújula, una empresa de consultoría tecnológica que trabaja con gigantes como Meliá u Hotelbeds, el 13 de febrero de 2013. No se le olvida la fecha porque estaba aterrorizado. Llegó junto a su compañero Fabián Mendes en febrero de 2013 como alumno de FP Dual y hoy, dos años después, ahí siguen, ahora contratados como programadores juniors: "Cuando empecé el curso no sabía nada", rememora Rubén, un ejemplo de éxito de este modelo que el próximo 1 de octubre comienza su tercer curso de implantación.

El Borja Moll, pionero

El inicio fue, como todos, algo complicado. Todo estaba por hacer. Lo recuerdan Guillem Salom, profesor del Borja Moll y primer tutor de Balears de FP Dual, y su compañero David Gelpi. Juntos se han pateado muchas empresas buscando contratos de formación para sus alumnos, la parte del proceso más complicada.

Gelpi valora que es un proyecto de innovación en varios sentidos, "de gestión, educativa y empresarial", y que en Balears se ha creado un modelo propio, distinto al que se puede estar aplicando en Alemania -referente indiscutible de la FP Dual- o en el País Vasco. "Es un trabajo casi artesanal", destaca.

Cada proceso de gestión y enseñanza varía según el ciclo formativo, según el alumno, según la empresa en la que consigue plaza e incluso según el departamento en el que se ubique al estudiante. El profesorado le echa muchas horas y se tienen que cambiar muchas cosas, estructuras y dinámicas; algo que no suele ser fácil.

Para las empresas también es un cambio de chip y ésa parte es la que está costando más, aunque el número de compañías participantes ha crecido desde las cinco pioneras de 2012 hasta las más de 200 involucradas este curso.

Para la empresa puede parecer más arriesgada la FP Dual que la tradicional. Los alumnos de FP ´estándar´ solo hacen tres meses de prácticas al final de los dos años de clase, así que llegan a la empresa con toda la teoría cursada. Con la Dual, se incorporan casi en seguida, tras recibir una formación básica, con un contrato para un año y medio y un sueldo. Puede dar más vértigo, pero también ofrece más posibilidades.

Una forma de "hacer cantera"

En Brújula tuvieron claro desde el principio que querían participar, ya que forma parte de su filosofía el "hacer cantera". Desde el área de Recursos Humanos, Francisco Mesan, ve fundamental tener clara la estrategia de personal, porque es cierto que es una inversión. Y no tanto de dinero, sino también de tiempo, ya que tiene haber un tutor que supervise y guíe a los estudiantes y les vaya buscando tareas adecuadas a su nivel y les enseñe la metodología y herramientas propias de la compañía. Por eso la inversión sale finalmente rentable: "Llegan como un papel en blanco y crecen aquí".

Así lo ve también Sion Vives, jefe de proyectos que fue el tutor de Rubén. Durante ese proceso Vives asegura que contó con un elemento fundamental: "La gran motivación con la que llegaron".

Hay que tener esa motivación, ya que la cosa se vuelve algo ardua los meses que los chavales compaginan sus horas por la mañana en la oficina con las clases por la tarde, más los proyectos y tareas (de uno y otro sitio), más las horas que se echan en casa... "Hay que organizarse muy bien", asegura Rubén, quien indica que a veces se hace difícil también el complementar lo que se aprende en los dos sitios, que pueden llevar ritmos diferente. Sus exprofesores admiten que la exigencia es mayor que en otros ciclos, pero que también es cierto que los alumnos llegan más mentalizados y preparados para el trabajo autónomo.

Entre las ventajas de este modelo, Rubén ve que desde el minuto uno estás "integrado en la empresa" y que los compañeros te ayudan mucho además de, por supuesto, el hecho de tener un contrato -bonificado para las empresas­- , cobrar un sueldo y cotizar: "Compañeros de otros ciclos me decían que también querían hacer la Dual".

A base del ensayo y error, los distintos actores de la FP Dual van introduciendo cambios curso a curso. La idea es que el modelo se vaya extendiendo y perfilando. Maria Francisca Alorda, directora general de FP, defiende que la implantación va "poco a poco" pero "por el camino correcto".

Este año se ofertan 220 plazas de FP Dual en Balears de ciclos variados: de Restauración y Cocina a Gestión Administrativa o Carrocería, por ejemplo. El sistema varía de un ciclo a otro: así, en los de Electricidad pasan tres días en el instituto y tres en la empresa, mientras que en los de Restauración, debido a la temporada turística, están seis meses formándose y otros seis trabajando.

Desde el sindicato STEI-i, Biel Caldentey opina que así como en el País Vasco el tejido productivo es industrial y se ha conseguido el compromiso de esas empresas, aquí será necesario lograr la implicación del sector turístico. Señala no obstante la necesidad de que haya "control educativo" para que los aprendices no acaben siendo mano de obra barata. Gelpi y Salom no lo ven probable: "Estamos en contacto permanente con ellos y se cumplen los contratos y los horarios y el salario es según convenio y lo firmado".

Un modelo de mucho recorrido

"Son aprendices, no sustituyen a un trabajador y las empresas lo saben", añade Cristina Juliá, responsable de formación de la Cámara de Comercio, quien hasta el curso pasado ha estado encargándose de gestionar la participación de las empresas (ahora están pendientes de renovar un convenio con Educación). Para Juliá la FP Dual tiene mucho recorrido "poniendo los medios para que los distintos modelos se den en condiciones de calidad".

David Gelpi y Guillem Salom indican que supone mucho trabajo para el profesorado que el sistema funcione como "un reloj", pero reconocen que cuando luego ven casos como el de Rubén, se sienten satisfechos de haber puesto su "granito de arena" y piensan que el esfuerzo merece la pena.

Compartir el artículo

stats