El sector servicios, en el que se enmarca la actividad turística, es un motor que sigue ganando revoluciones en Balears, hasta el punto de cerrar el pasado mes de agosto con un numero superior de empresas al que tenía antes de iniciarse la crisis económica. Y aunque su mejoría está mucho más retrasada, también la construcción y la industria muestran ya una senda de recuperación de su tejido empresarial.

Según los datos facilitados por la Tesorería General de la Seguridad Social en Balears, el archipiélago cerró el mes pasado con 45.211 empresas dadas de alta, una cifra que supera en un 3,1% las que se contabilizaron durante el mismo mes del pasado ejercicio. Por contra, eso supone un ligero descenso si se compara con las cifras del mes anterior, pero julio es siempre el mes con más actividad empresarial y más empleo del año en el archipiélago.

Pero como se ha indicado, la situación más llamativa se vive en los servicios (que agrupa a las empresas hoteleras, las de restauración o el comercio, entre otras ramas), en el que se contabilizaron en agosto 37.515 altas empresariales. Este caso adquiere una especial relevancia porque esta cifra supone superar las 36.595 de 2014, y en ambos casos se queda ya por encima de las de 2007 y 2008, antes de que se iniciara la crisis económica, aunque un aspecto que no se detalla en el informe de la Seguridad Social es el tamaño de las mismas.

Mejoría generalizada

Pero como se ha apuntado, se pone en evidencia también que la senda del crecimiento está adquiriendo un carácter generalizado. Un ejemplo evidente es el de la construcción, que en agosto contabilizó 4.741 centros de trabajo, mejorando así la cifra de 4.367 correspondiente al mismo mes de 2014. La diferencia es que en este caso la situación sigue quedando muy lejos de los niveles de actividad empresarial anteriores a la crisis, cuando todavía se vivía en el marco de una burbuja inmobiliaria. El dato es lo suficientemente significativo: en agosto de 2007 las altas en la Seguridad Social en este sector alcanzaron las 7.580 y en 2008 las 7.003. En cualquier caso, desde su propia patronal se admite que nadie aspira a recuperar un volumen de actividad tan desproporcionado como el que se produjo durante los años precios a la crisis económica.

La industria balear, muy dependiente de la actividad constructora, también muestra una tendencia positiva por lo que a la evolución de su tejido empresarial se refiere. Durante el mes pasado contabilizó 2.798 altas empresariales, cuando doce meses atrás esa cifra había sido de 2.720. Pero la situación también dista mucho de la que se daba en 2007, año en que ese número ascendía a 3.242.

Finalmente, los datos de la agricultura son poco significativos pero también muestran un crecimiento, al pasar de las 140 altas de 2014 a las 156 de este año.

Volviendo al sector servicios, sus principales actividades empresariales, muy vinculadas a la actividad turística, mantienen esa tendencia al alza. De este modo, la cifra de empresas de restauración se situó en agosto en 7.729, mejorando así las 7.586 de 2014 (desde su asociación empresarial se lleva tiempo admitiendo que muchas personas que habían perdido su empleo han visto una salida en la apertura de uno de estos establecimientos), mientras que en la rama hotelera se han alcanzado las 2.103, también superando las 2.008 del ejercicio anterior.

En el caso del comercio minorista, el mes pasado se contabilizaron 7.503 altas en la Seguridad Social, frente a las 7.467 del ejercicio anterior, manteniendo la tónica positiva aunque más moderada.

Situación municipal

Por municipios, son pocos los que muestran una evolución negativa en su número de empresas, y las grandes localidades presentan una tendencia al alza.

Así, en Palma se ha pasado de las 14.957 empresas de agosto de 2014 a las 15.537 de este año; en Calvià, el incremento ha sido de las 2.644 a las 2.692 altas en la Seguridad Social; en el caso de Manacor, se ha ido de las 1.424 a las 1.442; Inca ha crecido de las 849 a las 912; Llucmajor ha pasado de 927 a 977; y Marratxí ha pasado de 923 a 951.

También crecen Pollença, Santanyí, Andratx, Capdepera o Sóller, por citar otros ejemplos.

Las tendencias a la baja son escasamente significativas, aunque Alcúdia desciende de las 907 a las 905 altas empresariales; Son Servera, de las 608 a las 607; y Santa Margalida de las 478 a las 47, entre otras poblaciones.