La conselleria de Educación responsabilizó ayer a los propios colegios del Parc Bit de que se esté dilatando el proceso de revisión de sus conciertos. El director general de Planificación, Antoni Morante, aseguró que siguen esperando una documentación requerida a los centros ya a principio de mes.

Morante garantizó ayer a los representantes de los padres de alumnos de estos centros que su voluntad es "solucionar la situación lo más rápidamente posible", pero que ahora la Conselleria está pendiente de una información solicitada a Aixa y Llaüt a principios de agosto "para acelerar el proceso y evitar perjuicios innecesarios". Esta documentación aún no les ha llegado a pesar de que, según Morante, "han insistido".

La reunión con los representantes de las familias de estos centros vinculados al Opus Dei y que se separan al alumnado según su sexo estuvo presidida por el conseller, Martí March. En ella, se explicó a los padres que se ha suspendido el concierto de tercero a sexto de Primaria para el curso que viene mientras se resuelve la revisión de oficio que impulsaron después de que los servicios jurídicos de la Conselleria e Intervención les advirtieran de errores administrativos sobre el modo en que les fueron concedidos. Cabe recordar, que el anterior equipo de la Conselleria que dirigía Joana Maria Camps acordó subvencionar esos niveles a estos colegios para evitar así el pago de una indemnización millonaria al que le obligaba una sentencia judicial. Dicho acuerdo es el que ahora revisa el equipo de March.

"Que corrijan sin perjudicar"

Así se expuso la situación a los representantes de los padres que acudieron ayer a la Conselleria, quienes consideran que pese a todo Educación incurre en un "abuso de autoridad" al suspender los conciertos para estos niveles con el inicio de curso tan próximo: "Podemos entender que sea un error de la Administración y que se ha de subsanar, pero de ninguna manera ese error puede acabar perjudicando de esta manera al administrado".

De esta manera se expresaba tras salir de la reunión el representante de la Asociación de Padres de Alumnos del colegio Llaüt, Ángel Rodríguez, que valoró que se les asegurara una pronta solución, aunque lamentó que no se concretó en qué sentido irá. Repitió las palabras de Morante, que les indicó durante la reunión que el proceder de la Conselleria se basará en tres aspectos: "El respeto al interés general, la seguridad jurídica y el respeto a las diferentes sentencias judiciales que se han ido publicando sobre este tema".

El director general se refería a dos sentencias hechas públicas en los últimos años en los que el juez reconocía el derecho al concierto de estos colegios en diferentes niveles. El concierto en sí fue concedido y garantizado a estos centros a través de un convenio firmado por el Govern de Jaume Matas, pero cuando el PP perdió las elecciones y asumió el poder el Pacte de Progrés los centros se encontraron con que se les denegaba la renovación de los conciertos ya pactados y cerrados, por lo que iniciaron una batalla judicial.

Ante la decisión tomada por el equipo de Martí March al poco de llegar a la Conselleria, los padres presentaron un recurso contencioso-administrativo que, tras las explicaciones recibidas ayer y a la espera de conocer esa "rápida solución" que les promete el conseller, aún no saben si mantendrán. Tienen previsto celebrar una reunión en breve para acordar su estrategia a seguir.