La celebración del Día Internacional de la Juventud se adelantó un día. Ayer, la Dirección General d´Esports i Joventud convocó un encuentro con todas las entidades juveniles para "recuperar el contacto institucional con este colectivo". Según explicó la consellera de Participación, Transparencia y Cultura, Esperança Camps, "los jóvenes son una asignatura pendiente que el anterior partido tuvo guardado en el cajón durante cuatro años". "Participación" fue la palabra estrella en este encuentro. Diferentes instituciones hicieron referencia a este término como "el primer paso para retomar las relaciones y así, poder trabajar todos juntos".

"Hoy empieza un reto". Así empezó el discurso de Carles Gonyalons, director general d´Esports y Juventud. Con nuevas políticas, el nuevo Govern pretende acercarse a los jóvenes. "Creemos que tenemos que hacer las cosas de otra manera", apuntó Gonyalons. Un nuevo camino que comenzará con la creación de un "consejo de participación", a fin de conseguir que las entidades juveniles transmitan a los políticos sus necesidades. Y en segundo lugar, Gonyalons señaló la recuperación de la coordinación con estos grupos a través de ayuntamientos, consells, entre otros. Además, el director general d´Esports y Juventud concluyó que los jóvenes "son los únicos protagonistas en esta historia, quienes ayudarán a superar este reto a través de sus colaboraciones".

"La crítica a la administración es fundamental para mejorar las políticas de Balears", destacó por su parte el director del Institut Balear de Joventud, Joan Ferra. En concreto, este encuentro lo que pretendía era saber cuáles son las inquietudes de los jóvenes. Unos comentarios que no llegaron hasta pasada media hora.

Participación cívica de jóvenes fue el lema del encuentro. Un mural con un árbol en el centro fue el escenario elegido para que los asistentes apuntaran en papeles con forma de hoja sus ideas. La timidez invadió la sala, y durante unos minutos ninguna asociación se atrevía a escribir lo que pensaba. Vergüenza aparte, poco a poco los jóvenes expresaron sus peticiones.

"Soy J.R de 13 años y miembro d´IREFREA. Me he fijado que en la escuela, entre segundo y tercero de ESO, hay muchos niños que empiezan a fumar y creo que se debería solucionar". Esta fue una de las primeras peticiones de la jornada. A todos los asistentes les sorprendió la juventud y entereza del pequeño, que pedía acabar con el tabaco. Una inquietud compartida por Montse, de la misma asociación, quien explicó que le preocupaba mucho el consumo tóxico entre los jóvenes, "¿buscamos una solución juntos?", concluyó en su papel.

Entre refrescos y aperitivos, las palabras fluían entre los asistentes. Y ese era el objetivo de la jornada, "acercarse a los jóvenes para mejorar las políticas". Por ello, no solo se podían hacer peticiones por escrito sino que también crearon una aplicación para enviar mensajes instantáneos con consejos o críticas hacia el nuevo Govern. Algunos de ellos lo probaron y apuntaron que "hacía falta mantener un contacto más regular con los directores de entidades juveniles para conocerse". Estas entidades también pidieron puntos de encuentro, programas europeos para los jóvenes, más formación y red, y más apoyo a las asociaciones.

La dirección del Instituto Balear de la Juventud destacó que organizarán "un gran encuentro" con jóvenes antes de que acabe el año, a fin de "marcar las prioridades y organizar el discurso de los jóvenes hacia la administración, facilitando el debate, la crítica y la reflexión para caminar hacia el cambio", explicó Joan Ferrer.