La mitad de las 1.300 inspecciones que inaugurarán desde el próximo día 17 el plan de lucha contra la explotación laboral en Balears, 650, se harán en Mallorca, explicó ayer tras el Consell de Govern el conseller de Trabajo, Iago Negueruela, que abundó que otras 325 actuaciones están previstas en Menorca y la misma cifra en las Pitiüses. Consecuentemente, de los 32 subinspectores adicionales que llegarán de la península para llevar a cabo este plan, 16 trabajarán en esta isla, 8 en Menorca y los otros ocho repartidos entre Eivissa y Formentera.

El conseller se congratuló de que, por primera vez, estas actuaciones se vayan a llevar a cabo en Formentera y que vayan a incidir en los trabajos realizados en horario nocturno ya que, destacó, los inspectores pernoctarán en la isla pitiusa.

Negueruela se mostró convencido de que la cifra final de actuaciones superará la de las 1.300 inspecciones previstas inicialmente ya que estas darán lugar a otras. Esta actuación supondrá también la creación de una Unidad de Seguimiento de la Calidad del Empleo, aprobada ayer por el Consell de Govern, que dependerá del Servicio de Empleo de Baleares (SOIB) y que dará continuidad al plan contra la explotación laboral.

Estructuralmente precario

Negueruela recalcó que la explotación laboral es un problema de toda la comunidad autónoma que ha dado lugar a un mercado laboral "altamente precario", en todos los ámbitos de actividad y consideró lógico que comience en verano ya que es cuando hay más personas contratadas en las islas.

Tras recordar que 9 de cada diez contratos son temporales y que el 70% de los suscritos la pasada legislatura tenían una duración de menos de 20 horas semanales, el conseller mostró su preocupación porque en las islas se esté pasando a "un mercado laboral estructuralmente precario" y abogó por tanto por "diseñar políticas que lo puedan combatir".