El Consell de Govern ha acordado instar al Ministerio de Medio Ambiente a ampliar el Parque Nacional Marítimo-Terrestre de Cabrera para que pase a tener entre 20.000 y 90.000 hectáreas de superficie, lo que supondría como mínimo doblar el tamaño de esta zona protegida que considera "una joya".

El conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, ha detallado en la rueda de prensa posterior al Consell de Govern que el patronato responsable de la gestión del parque será el encargado de definir mediante el acuerdo de todos los implicados y de forma concreta los límites de la ampliación del parque, que en la actualidad mide 10.021 hectáreas.

Su ampliación implicaría que Cabrera sería "el Parque Nacional más grande y el segundo del Mediterráneo en extensión marítima" y además supondría que la red de parques nacionales incluiría entre sus espacios protegidos hábitats de profundidad que en la actualidad no están recogidos como son las montañas submarinas.

"Cabrera es nuestra joya, es la joya de los parques de Baleares y por tanto debe tener una vigilancia fuerte y con todos los medios disponibles", ha defendido Vidal, que ha explicado que la Conselleria está trabajando para que los agentes de medio ambiente "tengan todas las condiciones y embarcaciones y para vigilar lo que ya está declarado parque nacional".

Con la ampliación se plantea también aplicar otro tipo de mecanismos de vigilancia novedosos y adicionales mediante el uso de tecnología, entre los que Vidal ha citado los radares y las llamadas "cajas azules" de los barcos de pesca.

"Los mecanismos tecnológicos permiten garantizar que incluso si la ampliación llegara a las 90.000 hectáreas podríamos controlarla y vigilarla. Sería absurdo plantear una ampliación de esta magnitud si no fuéramos capaces tecnológicamente y con medios humanos de hacer esta vigilancia", ha recalcado.

Además de pedir al Ministerio la ampliación, el Govern da inicio hoy al proceso de participación para delimitar su tamaño al convocar el patronato del que forman parte, además de las administraciones central y autonómica, las organizaciones ecologistas, pescadores y ayuntamientos de Palma y Ses Salines.

La reunión de dicho patronato se convocará "lo antes posible", según Vidal en septiembre u octubre, para consensuar la propuesta definitiva que Baleares remitirá al Ministerio.

Vidal ha recordado que la ampliación "es una reivindicación histórica que marca un hito" y se basa en el estudio bionómico de Cabrera realizado por Oceana a petición del Govern, que detectó hábitats y especies que requieren protección.

Ampliar el parque supondría proteger fondos detríticos y sedimentarios, bancos de corales profundos, fondos de maërl, comunidades coralígenas y de filtradores singulares como esponjas, ascidios y briozoos; montañas, cuevas y cañones submarinos; poblaciones de algas fotófilas y esciófilas, así como escarpes y bajos rocosos.

El año que viene será el 25 aniversario de la declaración de protección de este espacio y su ampliación "sería la mejor forma de celebrar el aniversario", ha manifestado el conseller.