El mar subió más de un metro, y la oscilación dejó imágenes como la que ilustra esta página, en la que se ve la playa del Port de Alcúdia, el sábado, totalmente devorada por las aguas. La variación de nivel fue máxima en Menorca, donde el mar se elevó 130 centímetros en pocos minutos. Ayer la situación había vuelto ya a la normalidad, tras un sábado agitado en el que las subidas paulatinas de nivel de mar convivieron con una jornada de tormentas en diversos puntos de Mallorca, que dejaron secuelas en forma de farolas rotas, árboles arrancados y desperfectos en vehículos en puntos como Sant Jordi y Portocolom. Mientas el mar se agitaba, el cielo descargaba 4.000 rayos sobre las islas.