­El año pasado, 400 toneladas de deshechos de ruedas de coches fueron empleadas para construir suelas de calzado, parques infantiles, campos de fúbtol, carreteras, y en la fabricación de cemento. El resto de neumáticos se destinaron a la generación de energía eléctrica y a centros de transformación para su posterior reciclaje. SIGNUS prevé otras medidas cómo alargar la vida útil del neumático, así como el reciclaje u otras formas que respeten el medio ambiente.