El exalcalde de Esporles Miquel Ensenyat fue elegido ayer presidente del Consell de Mallorca gracias a los siete representantes del PSIB-PSOE, los seis de su grupo, Més per Mallorca, y los cinco de Podem. Los diez del PP y los dos de Ciudadanos votaron en contra. Los tres de El Pi se abstuvieron. Ensenyat empezó anunciando medidas de calado, como es la redacción de un nuevo Plan Territorial para "enterrar de una vez por todas que el territorio se convierta en la oportunidad de los especuladores". Asimismo, indicó que acabarán con la "aberración" de la importación de basura de otros países.

La sede del Consell de Mallorca se había engalanado para la ocasión. La sala de plenos, los salones contiguos y la entrada de la institución estaban repletos de gente para asistir a la elección de Miquel Ensenyat como presidente de Mallorca. Un Consell que desde el año 1995, cuando concluyó el mandato de Joan Verger, no había tenido un hombre como máximo mandatario. Han pasado cuatro legislaturas con mujeres presidentas: Maria Antònia Munar durante tres legislaturas, después vino la socialista Francina Armengol y durante los últimos cuatro años María Salom.

La presidenta del Govern, Francina Armengol, junto a la casi totalidad de sus consellers ocuparon los primeros bancos de la sala de plenos. También estaban presentes la mayoría de alcaldes de Mallorca. El vicepresidente del Govern, Biel Barceló, no pudo asistir a la toma de posesión de su compañero Miquel Ensenyat. Estaba en Menorca, ya que casi a la misma hora tomaba posesión como presidenta del Consell menorquín la también ecosoberanista Maite Salord.

El nuevo presidente del Consell inició su intervención recordando que él es candidato del PSOE, de Podemos y de su propio grupo, Més, que conformarán "un equipo de trabajo plural". "Queremos -añadió Ensenyat- aglutinar las diferentes sensibilidades para que confluyan en hacer del Consell una entidad próxima y abierta, que dé respuesta a las necesidades de los ciudadanos". El nuevo presidente insular basó gran parte de su intervención en los más desfavorecidos y en los más afectados por "una crisis que ha sido una verdadera estafa". En este sentido apostó por sacar el máximo provecho del Institut Mallorquí d'Afers Socials (IMAS).

Importación de Basuras

El Consell deberá modificar el Plan Director de Residuos para paralizar la importación de basura. Ensenyat indicó ayer que su intención es aprobar en pleno esta modificación antes de que concluya el verano. Hay que recordar que la basura procedente de Italia para ser incinerada en Son Reus llega a la isla durante el invierno. El presidente del Consell describió los residuos foráneos como "de dudosa procedencia".

De igual modo, la institución insular tiene intención de revisar el contrato con la empresa concesionaria de la incineradora, Tirme, para que "la incineración no condicione la posibilidad de acometer una política de residuos sostenible y responsable, tal y como ya están realizando muchos municipios de Mallorca". En este sentido, Ensenyat recordó que la incineradora está "sobredimensionada porque su planificación no obedecía a las necesidades reales, sino a intereses particulares".

El nuevo Consell de Mallorca implantará mecanismos de participación ciudadana en la toma de decisiones. También el nuevo presidente, como exalcalde, quiere que los municipios se sientan respaldados por la institución. Por ello anunció que la Assemblea de Batles ejercerá una función coordinadora entre ayuntamientos y los diferentes departamentos del Consell.

"Que nadie se asuste, este pacto representa una oportunidad histórica para recoger el mensaje de las urnas el 24 de mayo", aseveró Miquel Ensenyat.

En su intervención final recordó en varias ocasiones sus 10 años de alcalde de Esporles. Indicó que haría un discurso breve por el fuerte calor. Sacó su sentido del humor al relatar la frase de un sacerdote del convento de Sóller, donde él estudió durante su infancia: "En tiempo de melones, ni misas ni sermones".