Francina Armengol ya es oficialmente la primera presidenta de Baleares. La socialista se ha estrenado dando las "gracias" a todos los ciudadanos que han permitido el cambio de Govern, en el discurso de su toma de posesión.

Armengol, arropada por el líder del PSOE Pedro Sánchez y ante el ministro de Justicia, Rafael Catalá, en representación del Gobierno del Estado, ha agradecido especialmente "a los profesores, a los maestros, a los padres y madres, a los alumnos y a toda la comunidad educativa".

La presidenta del Govern ha subrayado su voluntad de buscar el mayor acuerdo posible para impulsar las políticas que el PSIB ha pactado con Més y Podemos. "Se ha acabado el tiempo en que al Consolat solo entraban algunos", ha dicho en presencia de su antecesor, José Ramón Bauzá.

"Comienza un nuevo tiempo" en el que se volcará en "la búsqueda de la justicia, de la igualdad, de la equidad", ha anunciado Armengol tras prometer su cargo en el patio del Consolat de Mar, abarrotado por unas 700 personas congregadas para seguir la ceremonia.

"Estas puertas abiertas simbolizan que esta es desde hoy vuestra casa", ha enfatizado la nueva jefa del ejecutivo autonómico, que ha asumido el cargo en presencia de cuatro de sus predecesores (todos menos Jaume Matas), del ministro de Justicia, Rafael Catalá, el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, y del líder de su partido y candidato a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez.

"Gracias por vuestra fuerza. Gracias por vuestra lucha. Gracias por vuestro esfuerzo", ha remarcado la nueva presidenta del Govern valorando la defensa de la educación por "tanta gente que ha salido a la calle de verde". También ha destacado la lucha para "defender la sanidad pública y universal, la lengua catalana, los derechos de los trabajadores, los servicios públicos y nuestro territorio".

"Gracias a quienes han soñado un país mejor. Los sueños mantienen vivos las esperanzas de la gente", ha remarcado en un discurso en el que ha expresado su "gran emoción y responsabilidad por ser la primera mujer presidenta de las islas".

"Lo que da precio al viaje es el miedo", ha dicho Armengol citando a Albert Camus, "hijo de una inmigrante menorquina". Así, ha explicado que "sin miedo, yo no estaría aquí. Y es el miedo el que me da el valor de afrontar un momento que tanto hemos deseado".

Entre los retos que afrontará su nuevo ejecutivo, Armengol ha señalado que el primero es "la financiación. Sin un modelo que reconozca mejor nuestra situación es imposible que nuestros servicios públicos mejores de manera sustancial", ha dicho.

"Y aprovecho la presencia del ministro de Justicia para pedirle al Gobierno que paralice la modificación del Régimen Especial. Queremos rehacerlo con un amplio debate ciudadano, con medidas que compensen claramente la insularidad. No vamos a renunciar a las inversiones estatutarias que hemos dejado de recibir durante cuatro años", ha dicho Armengol aprovechando la presencia del ministro Catalá ha quien se ha dirigido en castellano.

"Señor ministro, si queremos ser más competitivos, si queremos seguir siendo una comunidad con un modelo turístico de éxito, un modelo que es referente mundial, necesitamos trabajar juntos. Necesitamos mejores infraestructuras, mejores conexiones aéreas, inversiones públicas y unos servicios públicos de calidad. Esta presidenta será una presidenta que actuará con lealtad, pero que, evidentemente, será (y seremos) muy exigente en las reivindicaciones que merece este pueblo", ha afirmado Armengol.

Su segundo desafío será "la batalla contra la desigualdad". Por este motivo, y "porque la crisis todavía no ha acabado", ha manifestado que "nuestra prioridad es la creación de empleo y el empleo de calidad, el empleo digno".