Los cinco sindicatos que representan a los trabajadores del hospital público de Son Espases han decidido realizar una actuación conjunta con el único objetivo de denunciar el mal estado de la cocina.

La instalación se inauguró hace apenas cinco años y en una jornada normal puede servir comida a una media diaria de más de mil personas.

La pasada semana el sindicato Comisiones Obreras comunicó tanto a la conselleria de Sanidad como a la gerencia del hospital, que se habían detectado irregularidades en dicha instalación. Además de aportar una serie de fotografías, en las que se observaba la rotura de una máquina y la invasión de moscas en uno de los focos, denunciaba que la situación actual podía provocar una situación grave de salud pública. También denunciaba que los trabajadores estaban padeciendo situaciones de riesgo.

La gerencia del hospital de Son Dureta ha recibido esta semana un documento que firman los cinco sindicatos representativos del centro. Rubrican el documento, además de CC OO, los sindicatos UGT, STEI, CSIF y USAE. Estos representantes solicitan que se abra de inmediato una investigación sobre la situación de la cocina y se adopten medidas urgentes. Soluciones que se aplicarían para paliar las averías que sufren los electrodomésticos, evitar el uso de sartenes quemadas y acabar con el mal estado general e impedir la invasión de insectos en los focos de la cocina. Los sindicatos también aseguran que la zona de la freidora sufre un grave problema de suciedad, por lo que no les extraña que algunos usuarios del centro público hayan denunciado la mala calidad de la comida que se reparte a los enfermos. En dichas quejas se utilizan expresiones como "repugnante", "incomible", "apestosa", "recalentada" o "repetitiva".

En la denuncia que se entregó a principio de mes en la gerencia del hospital, donde ya se comunicó el problema de la cocina, se acompañó el documento con una serie de quejas de pacientes, con registro oficial, en las que se quejaban de la mala calidad de los alimentos que recibían.

Las fotografías recogidas por los trabajadores también demuestras las constantes averías de los electrodomésticos. La más grave la padece la trituradora de alimentos, que suele obstruirse con frecuencia y provoca que los residuos se acumulen en el suelo por donde deben pisar los trabajadoras.

En el escrito se reclama que, no solo se investiguen los hechos que se denuncian, sino que también se impongan sanciones. Piden que se aparte de sus puestos de responsabilidad tanto a la gobernanta como al jefe de cocina, así como los responsables de los que dependen. Asimismo, se reclama que se contraten a más trabajadores estatutarios y se recuerda que la comida que se prepara en esta cocina se reparte por todo el hospital, tanto a enfermos como al personal.